QUIEREN CONVERTIR EL PEÑÓN EN REFERENTE TURÍSTICO
En el último mes y medio Gibraltar ha construido dos espigones que se adentran 50 metros en el mar. La versión oficial es que son necesarios para proteger a la zona de los fuertes temporales.
Pero llama la atención que a menos de medio kilómetro, en el área oriental del Peñón, se hará un ambicioso plan inmobiliario conocido como el East Side Proyect. Se trata de un megacomplejo residencial con un casino, un hotel flotante, decenas de edificios y hasta quince muelles para yates y embarcaciones.
Los pocos kilómetros de superficie del peñón, casi 7, se han quedado muy cortos para las aspiraciones de su ministro principal Fabian Picardo. Por eso, la única forma de extenderse es esta, ganando terreno al mar. Una expansión con la que el Peñón incumpliría la legislación internacional.
No es la primera vez que quieren crecer ocupando un terreno que no está bajo su jurisdicción. La construcción del aeropuerto también generó polémica, al no respetar lo pactado en 1713 en el Tratado de Utrecht.
Ahora la roca quiere ampliarse para así, junto a sus proyectos residenciales, convertir a Gibraltar en un punto de referencia del ocio y el turismo de lujo en el sur peninsular.