LE PERMITIRÁ UTILIZAR SUS INVESTIGACIONES
La justicia francesa informó de que comunicará a la española los diferentes peritajes que se van a realizar del arsenal encontrado en los ocho depósitos de armas y material explosivo de ETA cuya localización se comunicó este sábado.
La Fiscalía antiterrorista de París señaló que se hará por los canales de cooperación judicial que existen entre ambos países y que ello permitirá que la justicia española utilice esas informaciones, lo que da pie a que se puedan aclarar algunas acciones de la organización terrorista que aún están por esclarecer, según un comunicado.
También indicó que desde el pasado 4 de abril ha abierto una investigación preliminar, en el marco de la cual la policía francesa está realizando el registro de esos ocho zulos, ubicados en el departamento de los Pirineos Atlánticos, del que forma parte el País Vasco francés. Avanzó que allí se han encontrado "decenas" de pistolas y de fusiles, "miles de municiones, varios cientos de kilos de explosivos y productos que entran en la composición de explosivos, varios cientos de detonadores y retardadores".
La Fiscalía francesa indicó igualmente que se está realizando "el inventario preciso" de las armas, las municiones y los otros productos y objetos aprehendidos, y que "todos" serán objeto de peritajes de la policía técnica y científica.
La investigación preliminar del arsenal de ETA busca aclarar si se derivan responsabilidades por tres delitos, los de terrorismo, infracción a la legislación sobre las armas y sobre los explosivos. El Ministerio Público recordó que la lista de los zulos se presentó a primera hora del sábado ante el fiscal de Bayona (suroeste francés) en el Tribunal de Gran Instancia de esa ciudad por "un miembro" de la llamada Comisión Internacional de Verificación.
La lista iba acompañada de documentos escritos en euskera en los que aparecía el supuesto contenido en cada uno de ellos, y que fueron entregados a la Policía Judicial francesa. A ese respecto, el ministro francés de Interior, Matthias Fekl, indicó que desde primera hora del sábado se habían movilizado para acudir a esas ocho localizaciones 180 policías y gendarmes de cuerpos antidisturbios, así como una decena de equipos de artificieros y "numerosos efectivos" de la Policía Judicial y de los servicios de seguridad interior.
Su misión era garantizar la seguridad de los diversos emplazamientos, así como evitar cualquier daño con las armas y explosivos. "Nuestro objetivo es que esta operación potencialmente peligrosa se efectúe en unas condiciones que minimicen al máximo los riesgos para la seguridad de las personas y de los bienes", dijo Fekl.
El ministro francés consideró que la entrega "unilateral" por parte de ETA de las localizaciones de esos ocho depósitos de armas es "un gran paso", y envió un mensaje de recuerdo para "todas las víctimas", en particular para los policías y los agentes de la Guardia Civil española. Insistió también en que "la restitución de armas a la justicia, bajo cuya responsabilidad está trabajando actualmente la Policía Judicial, no puede más que enmarcarse en el respeto del Estado de Derecho".