Caso ERE
Los rumores sobre un posible indulto a Griñán dividen al PSOE y toda la oposición se opone. Ahora, un antiguo consejero de la Junta de Andalucía, también condenado por los ERE, también pide al Gobierno que le indulte.
La clase política se prepara para un año electoral clave, donde las elecciones autonómicas y municipales pueden suponer una consolidación de las últimas victorias de la derecha o un giro para que la izquierda vuelva a recuperar su poder, que tan mermado se ha visto en los últimos tiempos. El PSOE afronta unos comicios decisivos que pueden llegar a ser un anticipo de lo que ocurra en las siguientes elecciones generales, que se celebrarán, a más tardar, siete meses después de las anteriores.
Y es precisamente el PSOE el partido que está envuelto en un problema muy serio. La sentencia de los ERE a la apertura del año político ha puesto en una encrucijada a los socialistas, debatiéndose ya si se debe o no conceder el indulto a José Antonio Griñán. Expresidentes del PSOE ya han firmado un manifiesto para apoyar el indulto, pero la última palabra la tiene el actual jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez. Por si fuera poco, Griñán ya no será el único que, con toda probabilidad, pedirá el indulto.
Francisco Vallejo, que fue consejero de Obras Públicas y Transportes y también consejero de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía, también ha sido condenado en la sentencia de los ERE y ya ha comunicado que pedirá el indulto de forma parcial para evitar su entrada en prisión. Vallejo, que está condenado a siete años de cárcel por malversación, ha hecho la petición a través de un comunicado emitido por su familia, donde solicitan dicho indulto aludiendo a motivos "de perspectiva humanitaria, de justicia material y de proporcionalidad".
¿Puede pasar factura electoral el caso ERE a los socialistas?
El caso ERE está siendo todo un quebradero de cabeza para el PSOE, que se ha visto notablemente perjudicado en Andalucía, su mayor feudo electoral, donde ha pasado de lograr históricas mayorías absolutas a obtener su peor resultado, con tan solo 30 de 109 escaños, con el PP obteniendo mayoría absoluta y con Vox creciendo ligeramente, lo cual ha convertido esta tierra en un nuevo feudo de la derecha. La cuestión es, ¿podría ocurrir esto también a nivel nacional o es tan solo algo específico en este territorio?
Lo cierto es que la debacle del PSOE se ha acentuado en la mayoría de las elecciones autonómicas desde que formó su Gobierno de coalición con Unidas Podemos. En Galicia se estancó, y en el País Vasco, solo subió un escaño, sin poder aprovechar el fuerte descenso de Podemos. En la Comunidad de Madrid, cayeron hasta la tercera plaza, y en Castilla y León perdieron también el liderazgo. En Andalucía, llegó su peor resultado histórico en la región. Y ahora, las próximas elecciones determinarán si esto seguirá así o habrá un cambio a nivel electoral.