HOY SERÁN INTERROGADOS TRAS PASAR LA NOCHE EN PRISIÓN
Más de cien simpatizantes de ETA plantan cara a los gendarmes que custodian el lugar en el que han sido detenidos los etarras. Entre gritos pidiendo su libertad, un centenar de simpatizantes de ETA intentan a empujones y pedradas llegar a la casa donde están los arrestados. Los agentes responden con gas pimenta para dispersarlos.
Poco antes de la medianoche, los cuatro detenidos son conducidos a la Gendarmería. El registro ha durado nueve horas y se han incautado dos pistolas y abundante material informático, que puede ser clave para conocer los últimos movimientos de ETA.
Los agentes vigilaban desde hace días los alrededores de un hotel rural en Saint Etienne de Baïgorry. Tenían información de que en ese lugar aislado y con encanto a pocos kilómetros de la frontera con España se iba a producir una reunión de la cúpula etarra.
David Pla e Iratxe Sorzabal eran dos de los terroristas más buscados junto con Josu Ternera en paradero desconocido. Pla hizo carrera como dirigente de Jarrai, mientras que Sorzábal, perteneciente al sector más radical, formó parte de un comando que participó en tres asesinatos. Para el Gobierno, sus detenciones son un golpe letal a lo poco que quedaba de ETA.
El tercer detenido es Ramón Sagarzazu 'Ramontxo', antiguo jefe del aparato internacional de la organización. Pantxo Flores fránces y propietario de la casa rural donde se ha desarrollado la operación, es el otro arrestado.