Juicio al 'procés'
El fiscal Miguel Ángel Carballo ha planteado sus dudas sobre la existencia de un plan para detener al expresidente catalán Carles Puigdemont si se declaraba la independencia que el mayor de los Mossos Josep Lluís Trapero confesó en el Tribunal Supremo que había ordenado preparar. "¿Dónde está ese plan?", le ha llegado a preguntar varias veces Carballo a Trapero tras cuestionarle que no hablara de ello hasta que declaró como testigo en el Supremo, mucho después de no haberlo hecho en sus declaraciones como imputado en la Audiencia Nacional.
Según ha recordado Carballo, que ha protagonizado un exhaustivo interrogatorio al mayor, en su comparecencia en el juicio del "procés", Trapero reveló que había redactado un plan para la eventual detención de Puigdemont. "¿Por qué no lo manifestó hasta que testificó en el Supremo?", ha querido saber entonces el fiscal. "Porque respondo buenamente a lo que se pregunta", le ha respondido Trapero, quejándose de que tampoco se le permitió "hablar demasiado" en los interrogatorios que tuvo que responder como imputado en la Audiencia Nacional. Ante esta respuesta, el fiscal le ha indicado que en esas comparecencias también le interrogó su abogada, momento en el que la letrada ha pedido al tribunal intervenir para poner de manifiesto que en la causa de la Audiencia Nacional "ya constaba esa información mucho antes de su declaración" en el Supremo. Ha recordado así que en su declaración del 23 de febrero de 2018 le preguntó "expresamente" si el día que se aprobó la DUI se puso en contacto con alguna autoridad judicial y de Fiscalía y el mayor explicó que se puso a disposición para recibir las instrucciones que estimaran pertinentes. "No solamente llamó -al presidente del TSJC y al fiscal jefe de Cataluña-, sino que remitió dos cartas transmitiendo esa disposición a recibir cualquier tipo de orden", ha insistido la letrada de Trapero, Olga Tubau. Además ha añadido que en el recurso de apelación contra el procesamiento del mayor se aportó esa información, y que el 25 de octubre, dos días antes de la declaración de independencia en el Parlament, pidió a un mando de su prefectura que diseñara el eventual dispositivo necesario si finalmente se aprobaba la DUI. "Lo que dice la letrada es cierto", ha admitido Carballo, si bien ha insistido que "de lo que no habló es de la existencia de un plan diseñado" para detener a Puigdemont. Por eso el fiscal, visiblemente molesto con la interrupción de la abogada, ha preguntado a Trapero si le ofreció ese plan a esas autoridades judiciales, a lo que el mayor ha contestado que realmente no se esperaban que la DUI "fuera para adelante". "Pensé que no iba a suceder", ha asegurado. El fiscal ha dedicado cerca de diez horas en interrogar a Trapero, a continuación les tocará a las defensas preguntar al mayor.
La actitud de los mossos
Además han sostenido un 'rifirrafe' en el que el mando de los mossos se ha tratado de defender del cuestionamiento del fiscal sobre la actuación supuestamente pasiva de los agentes en la jornada del 1 de octubre de 2017, durante el referéndum ilegal. Todo ha empezado cuando el representante del Ministerio Público ha pasado a citar una por una comunicaciones concretas entre los efectivos desplegados en colegios y los mandos regionales de los Mossos, que eran los que coordinaban a todos los binomios -pareja de dos agentes-, para tratar de demostrar que desde la policía autonómica había una "inducción a no hacer nada". Por cada comunicación que iba citando el fiscal, Trapero ha dado una respuesta intentando desmontar la teoría de la acusación: o bien ha defendido que la actitud de un equipo no se puede generalizar a todo el cuerpo, o bien ha aludido a la falta de efectivos o bien ha ofrecido algún razonamiento "coherente" sobre por qué los mossos manifestaban ciertas cosas a su centro de control. Sobre una comunicación en la que un agente informaba de que el referéndum ilegal se estaba desarrollando "de forma pacífica y con total normalidad", Carballo ha preguntado directamente al mayor si "realmente sigue pensando que esos agentes iban a impedir" la votación, a lo que Trapero ha replicado que tiene "muy pocas dudas" de que la "actitud" de los 7.800 mossos y sus mandos "no era otra que tratar de impedirlo".