Monarquía
El rey Felipe VI protagonizaba institucionalmente el acto en memoria de las víctimas del coronavirus mientras diferentes medios publicaban más detalles de las supuestas cuentas en el extranjero del rey Juan Carlos, informaciones basadas en su mayoría en las conversaciones grabadas por el excomisario Villarejo -en prisión preventiva- durante las conversaciones que tuvo con la antigua amiga del rey, Corinna Larsen.
Aviso al Gobierno
En una de ellas, difundida por 'El Confidencial', se da cuenta de que el Gobierno supo hace más de un año que don Juan Carlos tenía una fundación, 'Lucum', en Panamá, y que el actual rey era beneficiario de ella. Felipe VI ya lo dijo en el comunicado del 15 de marzo, cuando retiró los ingresos oficiales a su padre y renunció a su posible herencia. Decía que se había dado cuenta a la autoridad competente. Al parecer fue el jefe de su casa, Jaime Alfonsín, el que se lo contó a la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo.
Finca en Marruecos
Corinna Larsen también le dijo al expolicía Villarejo, según publica Okdiario, que Juan Carlos I recibió unos terrenos cerca de la ciudad de Marrakech como regalo del rey de Marruecos, Mohamed VI.
Defensa de Felipe VI
Precisamente tras el acto en la plaza de la Armería del Palacio Real ha sido la vicepresidenta Carmen Calvo la que ha hecho declaraciones sobre la situación provocada por las informaciones sobre las cuentas del rey Juan Carlos. Ha dicho Calvo que la Casa del Rey "tomará sus decisiones" y ha insistido en que el ejecutivo distingue "muy claramente" al rey emérito de la "impecable" labor que desempeña su hijo como actual jefe del Estado. La vicepresidenta ha puesto como ejemplo su intervención en el acto del Palacio Real "en nombre de todos, y como jefe del Estado, para despedir y para agradecer", y ha remarcado que al Gobierno solo le cabe reafirmar "el trabajo que hace día a día" siempre "en el lugar que la Constitución le sitúa". Por lo que respecta a su padre, ha apuntado que la Casa Real "tiene que tomar también sus decisiones", ha recordado que "una parte importante de la ciudadanía" está preocupada y ha señalado que en Zarzuela estos asuntos son objeto "de debate, como es lógico" pero "afectan a un tiempo que no es el tiempo del rey Felipe".
Varias investigaciones
Todos los dirigentes del PP presentes han valorado la situación de una forma totalmente distinta. El presidente del partido, Pablo Casado, ha explicado que quería enviar un mensaje de "respaldo" a la Casa Real y ha puntualizado que "en concreto" se refería a Felipe VI. "Creo que es una institución esencial, que es el símbolo de la continuidad histórica de España y por eso desde el PP defendemos a la Jefatura del Estado y a su majestad el rey frente a los ataques de algunos ministros del propio Gobierno", ha proclamado.
Algunos, como Alberto Núñez Feijóo, han sido más explícitos, dice que no quiere participar en debates interesados. Cree que hay varias investigaciones abiertas, que hay que dejar que sigan adelante, pero no hablar de unas para ocultar otras.