fue suspendida por el propio TC
El Gobierno de Pedro Sánchez ha anunciado que prepara una impugnación ante el Constitucional de la moción aprobada en el Parlament que reafirma "los objetivos políticos" de la resolución del 9 de noviembre de 2015, a tres días de la reunión con el presidente catalán, Quim Torra.
Los dos gobiernos llevan días preparando esa reunión con la voluntad de que sirva para retomar la interlocución política, pero la moción aprobada en el Parlament, con los votos de Junts per Catalunya, ERC y CUP, ha llevado al ejecutivo de Pedro Sánchez a abrir la vía judicial.
Dicha moción insta a reafirmase en los "objetivos políticos" de la declaración de ruptura del 9 de noviembre de 2015, que expresa la voluntad de avanzar hacia la independencia de Cataluña y que fue suspendida por el Tribunal Constitucional.
En este contexto, la portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha explicado después del Consejo de Ministros que el Ejecutivo tiene la intención de impugnar la moción en defensa de la Constitución y del Estatut. Para ello, ha pedido el preceptivo informe al Consejo de Estado, antes de presentar el que será el primer recurso al TC del Ejecutivo de Pedro Sánchez, algo que previamente había reclamado la portavoz nacional de Ciudadanos, Inés Arrimadas.
Pero este recurso, ha puntualizado Celaá, "va por un itinerario jurídico y la legalidad y la política van por otro" y "a nosotros nos corresponde hacer política", por lo que ha subrayado que se mantienen las "esperanzas" de que la reunión del lunes salga bien.
Desde el Govern, la consellera de Presidencia y portavoz, Elsa Artadi, ha considerado que el Gobierno ha actuado de forma "extremadamente imprudente" al decidir impugnar una moción que, a su juicio, solo expresa "la voluntad política de lograr la independencia", lo que ya figuraba en los programas electorales. "Es sorprendente que quien en teoría tiende la mano al diálogo actúe, en la primera decisión que debe tomar, para enviar al Constitucional una resolución política", ha añadido Artadi en unas declaraciones en Vilafranca del Penedès (Barcelona).
En todo caso, la portavoz del Govern entiende que la vía política y la judicial van "por separado", por lo que ha evitado señalar que la impugnación podría afectar el ambiente de la reunión del próximo lunes, aunque sí que ha aseverado que "será uno de los puntos de los que habrá que hablar".