Elecciones generales 2019
Tener una buena relación con el electorado, ser atento en redes sociales...¿cómo se ganan elecciones?
Es una pregunta compleja. Unas elecciones se ganan en base a muchos factores, pero en el mundo de la consultoría política, lo importante es hacer siempre una buena planificación estratégica y eso necesita, previamente, de una investigación. Un buen político y un equipo que esté trabajando con él lo que necesitan es, en primer lugar, invertir siempre en investigación.
En una buena campaña, todo está previsto si hay un gran plan, y esa es la clave
Después se diseña una estrategia y esta luego tiene que ser comunicada para buscar esa conexión con los ciudadanos. Además, se tiene en cuenta que los contrarios también juegan, y hay que buscar esos contraargumentos que pueden salir . En una buena campaña, todo está previsto si hay un gran plan, y esa es la clave.
¿Se puede hacer de cualquier político un buen candidato?
Creo que se puede hacer un buen candidato de cualquier buena persona, da igual que sea un mejor o peor comunicador. En el fondo, si hay algo detrás de esa persona que tiene aspiración por el sector público, un asesor le puede ayudar a pulir cualquier defecto. Incluso si miramos históricamente, podemos encontrar políticos que no nos gustan y les ha ido muy bien, y otros que nos gustan y parecen buenos, y les va muy mal. Un asesor lo que hace es mejorar las capacidades de su político, si este se deja asesorar.
¿Se puede hacer de esos "defectos" del candidato un "arma política" que usar a favor?
Es obligación del asesor hacer de esas debilidades y amenazas cosas positivas para que mejore, sobre todo en lo que venimos hablando estos días, en campañas electorales, en los debates, o en medios de comunicación. No conozco a nadie que no mejore.
¿Qué importancia tiene el lenguaje corporal en un político?
El lenguaje corporal tiene mucha importancia en la comunicación de los políticos. Podemos ir al viejo ejemplo de Nixon y Kennedy, que fue el primer debate televisado. La gente que lo escuchaba por la radio pensaba que había ganado Nixon y la que lo vio por televisión, que había ganado Kennedy. La comunicación no verbal en un discurso tiene un porcentaje de relevancia bastante importante.
Pero a día de hoy, con la cantidad de información a la que estamos expuestos ¿un debate televisivo aún puede dar la vuelta a las encuestas?
Aunque no toda la gente del país lo esté viendo en televisión, al final todo el mundo va a acabar informado de lo que ocurrió. Si algún candidato es capaz de lanzar un buen golpe en el debate electoral, puede condicionar bastante el resultado, y más cuando hay muchos indecisos y gente que no sabe si va a ir a votar.
De cara al debate del 4 de noviembre, ¿qué importancia tiene el abrir o cerrar un debate?
Pablo Iglesias empieza con una grandísima ventaja porque abrir y cerrar un debate es fundamental. Los debates se empiezan a ganar en la negociación previa. Aquel partido político que es capaz de plantear un debate el cual tiene un buen turno de apertura y cierre y, sobre todo, de sacar más beneficio de los temas que se van a debatir, tiene medio debate prácticamente ganado.
Pablo Iglesias empieza con una grandísima ventaja porque abrir y cerrar un debate es fundamental
La apertura y el cierre del debate son los dos momentos en los que los ciudadanos están atentos a la televisión, dos momentos de máximo impacto mediático. Si eres el primero, puedes decir algo que condicione las intervenciones de los demás y obligarles a que tengan que decir algo que tenga referencia a lo que tú has dicho. Por otro lado, si te toca cerrar, tienes la ventaja de que puedes llegar a hacer una conclusión general que englobe las opiniones de los demás, llevándolo todo a tu terreno.
Una vez analizados los cinco candidatos, ¿quién cree puede beneficiarse más de este debate televisivo?
Tienen mucha capacidad de oratoria todos, pero no veo que ninguno sea muy superior a los demás. De hecho, si comparamos los dos últimos debates, mucha gente ni siquiera coincidió en un claro ganador.
Hoy en día un mal gesto o una mala palabra puede hacerse bola rápidamente en las redes . ¿Significa esto que tiene que cuidarse más la comunicación de los políticos?
La importancia que tienen las redes sociales y la posibilidad de que se viralice algo negativo —lo que ahora es muy común— es algo que ahora está en el terreno de juego. Un político debe dominar muy bien qué dice, por qué lo dice, si dice o no dice y de qué forma lo dice. importancia. Además, evitar errores es fundamental porque algunos te persiguen por vida. Pero al mismo tiempo, no hay que dramatizar tanto sobre esto porque todo el mundo se equivoca y comete errores, y en el sector público ocurre lo mismo.
Un debate se empieza a ganar en la negociación previa
Se ha hablado mucho de la estrategia de Iván Redondo, asesor de Pedro Sánchez, y su previsión de que se iban a repetir elecciones. ¿Cree que le puede salir mal esta jugada?
Si la apuesta fue la de buscar unas nuevas elecciones, esta es muy arriesgada y veremos el resultado. Las encuestas, de momento, están diciendo que quizá no eran la mejor opción, pero queda campaña electoral por delante. Si ha sido una buena decisión o no, lo sabremos al final de la campaña.
¿Algún 'consejo imprescindible' para los candidatos, de cara a lo que queda todavía de campaña?
En primer lugar, hay que tener en cuenta que trabajas para los ciudadanos. El día que un político pierde esa perspectiva de la realidad, empieza a cometer ciertos errores y no le suele ir bien. Hay que investigar, saber qué necesidades tiene la gente, dar con la clave y, luego, lanzar buenas propuestas políticas para buscar esa conexión. Además, hay que pulir errores y fortalecer virtudes, rodearte de un buen equipo, confiar y delegar.
¿Se podría decir por tanto que en política también 'vale más una imagen que mil palabras'?
Es una muy buena pregunta porque está claro que ahora vivimos en un mundo audiovisual. Todos pensamos en clave audiovisual, por lo que esta tiene más valor que antes. Sin embargo, creo que una de las claves es aquel político que es capaz de hablar y conseguir imágenes audiovisuales en la mente de las personas.