El director de la Policía, en Venezuela para mejorar la cooperación en la lucha contra ETA
Antes de la visita de Velázquez, altos responsables de la Policía española han viajado al país iberoamericano.
Este viaje ya fue anunciado por el jefe de la Diplomacia española días después de conocerse el auto de la Audiencia Nacional con el objetivo de mejorar la colaboración en la lucha contra el terrorismo.
La visita se produce en el marco de la investigación por el juez Velasco sobre la posible "cooperación gubernamental" del Gobierno de Venezuela en la colaboración entre ETA y las FARC, según desveló el magistrado en un auto hecho público el pasado mes de marzo en el que procesaba a seis presuntos etarras y siete miembros del grupo colombiano por compartir información sobre el manejo de explosivos e intentar cometer varios asesinatos, entre ellos el del presidente del país sudamericano, Alvaro Uribe, y su antecesor Andrés Pastrana.
La investigación abierta en la Audiencia Nacional, que parte de los 25 correos electrónicos incautados en marzo de 2008 al dirigente de las FARC Luis Edgar Devia, 'Raúl Reyes', concluye que los contactos entre los dos grupos terroristas contemplaban la realización de cursos de adiestramiento a miembros de ETA en la selva colombiana y venezolana a cambio de "la localización en España de objetivos de acción terrorista por parte de las FARC" y formación en "las técnicas más modernas de guerrilla urbana".
Polémica con Venezuela
Este auto ha provocado una polémica entre el Ejecutivo español y el Gobierno de Hugo Chávez, cuya postura respecto a ETA ya provocó otro conflicto con España a finales de 2006, cuando se conoció que el Gobierno venezolano iba a conceder la nacionalidad a cuatro etarras, Lorenzo Ayestarán, Angel Aldana, Jesús Urteaga y Eugenio Barrutiabengoa, todos ellos con delitos de sangre, para evitar su extradición a España.
El Gobierno español se quejó formalmente y evitó esta medida, así como que las autoridades venezolanas indemnizar con más de 300.000 euros a dos etarras que habían sido extraditados años antes.
Tras conocerse el auto del juez Velasco, Hugo Chávez no dudó en acusar al magistrado de hacer "señalamientos inaceptables, de naturaleza y motivación política, sobre el gobierno venezolano" y lo consideró un vestigio de la época colonial española. En rueda de prensa en Hannover (Alemania), el presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, informó de que el jefe de la diplomacia española, Miguel Angel Moratinos, había pedido "explicaciones" a Venezuela sobre el auto, en el que se procesa al presunto etarra Arturo Cubillas, que trabaja para el Gobierno de Venezuela.