MAESTROS, EMPRESARIOS O AGRICULTORES
La mayoría de los diputados de Castilla-La Mancha dedica los primeros días de 2013 a volver a sus antiguos empleos o a buscar nuevas ocupaciones después de la entrada en vigor de la ley que les deja sin sueldo fijo. Unos afrontan la nueva etapa con la incertidumbre de cómo podrán compaginar sus dos responsabilidades y otros, los que no tienen otro trabajo, asumen que cobrarán sólo de las Cortes autonómicas los 955 euros que les corresponden como indemnización y los 150 euros de dieta cuando acudan a plenos o comisiones.
El primero en llegar a su nuevo trabajo ha sido el socialista José Molina, que ayer martes -tras veinte años de dedicación exclusiva a la política- volvió a las aulas del colegio Pedro Simón Abril (Santa Ana) de Albacete, donde ejercerá como profesor de apoyo. Como Molina, era maestro su compañero de escaño Santiago Moreno, quien no regresará a las aulas porque se ha jubilado de la docencia.
Al sector privado se reincorpora la socialista Delfina Carrasco, al darse de alta como autónoma y volver a la empresa de distribución de productos de limpieza que tiene con su marido. La deportista Sonia Reyes tiene la opción de volver a dar clase de taekwondo en el gimnasio familiar y el también socialista Fernando Mora ha pedido regresar a su puesto de sociólogo y politólogo en el PSOE, en la sede de Madrid.
Con el futuro más incierto se ve su compañero de bancada Luis Santiago Tierraseca, quien tras más de doce años dedicado a la política, no descarta incluso tener que dejar el Parlamento si encuentra un trabajo que le exija dedicación total. En parecida situación se encuentra José Manuel Caballero, pues, aunque es secretario general del PSOE de Ciudad Real, de momento sólo percibirá la indemnización de las Cortes y las dietas.
Varios diputados del PP tienen la opción de pasar a cobrar de las arcas municipales, pues son alcaldes o concejales con responsabilidades de gobierno, si bien, de momento, sólo el de Seseña (Toledo), Carlos Velázquez, ha dado ese paso y se ha puesto un sueldo de 40.000 euros anuales. La alcaldesa de Brihuega (Guadalajara), Adela de la Torre, ha dispuesto una partida de 31.000 euros para ese mismo fin, pero hoy ha precisado que aún no ha decidido si la ejecutará o ejercerá como letrada.
Han renunciado a cobrar de las arcas municipales alcaldes como el de Salvacañete (Cuenca), Vicente Giménez (PP), que sólo lo hará de las Cortes; el de Sigüenza, José Manuel Latre (PP), que quiere volver a dar clases, o el único alcalde socialista en las Cortes, Francisco López, regidor de Campillo de Altobuey (Cuenca), que compaginará la agricultura y la ganadería con sus responsabilidades institucionales. Otra socialista, en este caso concejala de Valdepeñas (Ciudad Real), Josefa Ruiz, tampoco cobrará del Ayuntamiento pues el PSOE se lo ha prohibido a todos sus diputados.
Más alcaldes del PP, como Pilar Martínez (Villalpardo, Cuenca), José Manuel Tortosa (Las Pedroñeras, Cuenca) y Antonio Martínez (Mahora, Albacete), no se han pronunciado aún sobre si cobrarán de sus ayuntamientos. Entre los funcionarios que han pedido su incorporación a diferentes administraciones están los socialistas Yolanda Lozano, Antonio Salinas y Rosa Melchor, aunque otros como María Dolores Andújar o Modesto Belinchón han visto cómo sus plazas en la función pública han sido amortizadas. La presidenta regional del PSOE y diputada autonómica, Matilde Valentín, tiene plaza de secretaria-interventora en el Ayuntamiento de Balazote (Albacete), aunque ha pedido una comisión de servicio en otro consistorio por ser su marido, Francisco Belmonte, el alcalde en esa localidad.
Al margen de estas dudas sobre el futuro laboral quedan los cinco miembros de la Mesa de las Cortes y los dos portavoces de los grupos, que son los únicos que mantendrán la dedicación exclusiva y la consiguiente retribución, además de los cinco diputados que también son miembros del Gobierno regional y cobran por ello.