CNI
Uno de ellos ya se encuentra en prisión provisional. Margarita Robles, ministra de Defensa, destaca que es el propio CNI quien ha denunciado.
Dos agentes del Centro Nacional de Inteligencia han sido detenidos por revelar información secreta a Estados Unidos. Uno de ellos ya ha sido enviado a prisión provisional. La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha confirmado este mismo lunes dicha información alegando que un juez ha iniciado la investigación por revelación de secretos a estos agentes por la presunta filtración de información reservada a Estados Unidos.
Según Robles, ha sido el propio CNI el que ha denunciado la supuesta filtración, de manera que el procedimiento se abrió a instancias suyas. La titular de la cartera de Defensa no ha proporcionado más detalles, ya que el procedimiento judicial se encuentra bajo secreto. El caso se en encuentra en manos de una jueza de plaza de Castilla (Madrid).
Margarita Robles ha proporcionado esta información durante su visita a la base militar de Adazi (Letonia), donde están desplegados más de 600 militares españoles.
Esta información era adelantada por 'El Confidencial', asegurando que las diligencias se instruyen "con la máxima reserva". Citando fuentes cercanas al caso, afirmaba además que la investigación "ha provocado una crisis con Washington, aunque el Gobierno de Pedro Sánchez ha intentado que no trascienda".
Dicho medio añadía que a los funcionarios del CNI se les investiga por revelación de secretos, aunque los hechos también podrían ser constitutivos de una versión agravada de ese delito, como la traición por espionaje para una potencia extranjera, lo que podría estar castigado con entre 6 y 12 años de prisión.
De manera habitual se suelen llevar a cabo controles sobre cómo se utiliza la información clasificada así como los documentos secretos. Fue hace un par de meses, a finales de septiembre o principios de octubre, cuando se tuvo conocimiento de que los agentes proporcionaban información a Estados Unidos. Por el momento, no se conoce qué información ha trascendido.
Después de conocer la información, el ministro de Justicia, Félix Bolaños, ha asegurado que desde el Gobierno aportarán "toda la colaboración" que esté en sus manos para que se "esclarezca" la investigación. Bolaños se ha pronunciado tras la reunión de ministros de Justicia de la Unión Europea y ha reconocido que, aunque la investigación no ha trascendido hasta este lunes, era una información que tenía "desde hace unos días".
Ha insistido en que "ahora lo que procede es que se desarrolle la investigación judicial" y que "toda la documentación y toda la colaboración que nosotros podamos aportar desde luego que lo haremos para que se esclarezcan cuanto antes estos hechos".
Félix Bolaños es el segundo cargo del Ejecutivo en pronunciarse tras haber conocido la noticia durante la tarde de este lunes.
Mientras se conocen nuevos datos sobre este caso de fuga de información, es preciso recordar que el CNI ya estableció un sistema de control interno para detectar filtraciones, o dicho en la terminología del espionaje, para detectar casos de traición. Fue tras la detención de un agente que vendió información a Rusia cuando se intensificaron esos controles.
Al parecer, los servicios secretos ya sospechaban de los dos agentes. Todas las alertas saltaron gracias a los controles internos del CNI, un sistema que se implantó tras la detención del primer espía español condenado por traición en democracia. Vendió documentos secretos a la Rusia de Putin. El Tribunal Supremo lo sentenció a nueve años de prisión.
Sin embargo, el Centro Nacional de Inteligencia ha pasado por otros momentos comprometidos. La primera mujer en dirigir el CNI fue Paz Esteban, a la que se cesó tras el escándalo de Pegasus, un software israelí de espionaje descubierto en el móvil de 65 dirigentes independentistas catalanes, entre ellos Pere Aragonés.
Unos años antes de esto, en el peor episodio para el centro de inteligencia español, ocho agentes murieron asesinados en Irak, siete de ellos tras una emboscada a los vehículos en los que circulaban en lo que se consideró un error grave en los sistemas operativos sobre el terreno.