Código penal
La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, aseguró este miércoles que la reforma del Código Penal para rebajar la pena por el delito de sedición "no forma parte en absoluto de la mesa de diálogo" con los independentistas catalanes y que sería la Justicia, no el Ejecutivo, la que, en su caso, aplicaría la "derivada" de una rebaja de la condena a los políticos sobre los que pesa una sentencia del Tribunal Supremo.
No obstante, desde el Ejecutivo se afanaban en asegurar que el Gobierno en su conjunto no tenía intención de impulsar esta reforma , sino que querían que partiera de los grupos parlamentarios en el Congreso.
La ‘número dos’ del Ejecutivo dejó claro que sobre esa reforma el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no hablará con ningún presidente autonómico en la ronda que iniciará próximamente con el de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, porque "no forma parte de ese escenario". Solo se someterá al Parlamento, donde habrá que negociar con los grupos para lograr la mayoría absoluta necesaria, al ser ley orgánica, aseguró.
Para hacer esa reforma del código penal se necesitaría mayoría absoluta pero Pedro Sanchez no tendría problema porque a sus diputados. Sumaría los de Unidas Podemos, los independentistas catalanes y vascos y Más País. En total 192 escaños.