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Guerra entre Ayuso y Génova

Cronología de una guerra abierta: cuatro días de enfrentamiento público entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso

Casado y Ayuso han optado por un enfrentamiento que dificilmente tiene vuelta atrás. Una guerra entre dos políticos que fueron amigos, cuando hace dos décadas empezaban sus carreras en las Nuevas Generaciones del PP.

El Partido Popular busca una salida a la guerra abierta entre Pablo Casado e Isabel Díaz Ayuso que evite la catástrofe en la formación. En medio de esta crispación, el presidente del PP, Pablo Casado, convocó a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, a una reunión que se celebró ayer por la tarde en la sede nacional. El Partido Popular ha asegurado en un comunicado que lamenta los acontecimientos de los últimos días y seguirá defendiendo junto a todos los militantes el mejor proyecto de futuro para España. Fuentes próximas a la presidenta madrileña han confirmado esa entrevista para "buscar una solución" pero han admitido que fue "infructuosa"

El miércoles por la noche saltó la bomba: varios medios publicaron que la dirección nacional del PP, a través de una empresa pública del Ayuntamiento de Madrid, estaba intentando espiar a Ayuso. En el centro de la polémica estaría un contrato directo de 1,5 millones de euros otorgado en abril de 2020 por la Comunidad de Madrid a la empresa Priviet Sportive, S.L. para comprar mascarillas FFP2 y FFP3, que estaría relacionado con su hermano, Tomás Díaz Ayuso.

Detrás de todo el espionaje estaría el director de Comunicación de Almeida, Ángel Carromero, que dimitió este jueves. La presidenta sacó toda la artillería y la respuesta no se hizo esperar. El secretario general del PP, Teodoro García Egea, negó que se estuviese elaborando un dosier contra la presidenta y cargó contra ella por atacar de forma "cruel e injusta a la dirección que le ha dado todo".

Casado se mantuvo callado hasta este viernes por la mañana, cuando acudió a una entrevista en la 'Cadena COPE'. Allí explicó que cuando la dirección del partido tuvo noticias de las supuestas irregularidades en la adjudicación de mascarillas para Madrid, lo primero que hizo fue llamar a Isabel Díaz Ayuso y decírselo, pidiéndole "por favor" que investigase lo que había pasado. Pero no hubo respuesta de Ayuso, que se limitó "a pedir públicamente que se adelantase la fecha del Congreso del PP de Madrid".

Posteriormente, Ayuso asumió que su hermano, Tomás, cobró 55.580 euros de una empresa contratada por su Gobierno para comprar mascarillas en China en abril de 2020, al inicio de la pandemia. "Es una contraprestación por su trabajo, no una comisión por intermediación", defendió Ayuso.

Muchos dirigentes del partido piden la salida del secretario general del PP, Teodoro García Egea, por la forma en la que ha gestionado este enfrentamiento entre 'Génova' y Ayuso. Este es sólo el último episodio de dos manos unidas que ya están completamente rotas.

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