Renovación CGPJ
Reynders se reúne con la cúpula judicial en su último día en España. Ha asegurado que si en julio del próximo año, cuando España accederá a la Presidencia de la UE, no se ha resuelto el bloqueo "habrá que utilizar otras herramientas".
El comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, acaba su visita exprés a España y todo parece indicar que volverá a Bruselas sin que el bloqueo en la renovación del Consejo General del Poder Judicial, que lleva atascada casi 4 años, tenga visos de solucionarse. Ayer habló principalmente con el Gobierno y la oposición y durante la jornada de hoy se reunirá con la cúpula judicial.
Esa ronda de contactos arrancaba a media mañana en el Tribunal Supremo, donde hablaba durante más de una hora con su presidente, Carlos Lesmes, que también preside el CGPJ.
"No ha habido avances, pero todavía tengo esperanza"
A la salida del acto, Lesmes se ha reafirmado en que dimitirá si la situación no resuelve, pero -asegura- "todavía tengo esperanza". Aunque sigue sin darse un plazo fijo, no sabe si seguirá en el cargo para el 12 de octubre. Y aunque la situación siga bloqueada "y no veo avances", ve como positiva la visita del comisario: "Yo creo que estamos mejor que antes. Su visita ha desenconado la posiciones".
Lesmes defiende también una reforma en el sistema de elección para que los jueces elijan a los jueces, pero considera que la prioridad renovar, "porque el nuevo sistema no entraría en vigor hasta dentro de 5 años".
Reynders también ha realizado declaraciones ante los medios al concluir el encuentro. "Soy optimista y veo que hay un compromiso de los partidos para renovar primero y cambiar el modelo después", aunque fuentes del Gobierno han precisado que el único compromiso alcanzado ha sido el de la renovación "porque se puede dar paso sin el otro".
Durante el resto de la mañana, Reynders se reúne también con el presidente del Tribunal Constitucional, Pedro González-Trevijano, y con el Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz.
"Problema reputacional" para la UE
Antes, a primera hora, ha intervenido en una desayuno informativo, donde ha querido dejar un mensaje claro tanto a Gobierno como a PP, sin mencionarlos. Reynders ha dicho que sería "un problema reputacional" para la Unión Europea que España llegue a la presidencia -le toca el próximo mes de julio- sin las recomendaciones, es decir, sin haber renovado el poder judicial ni haber emprendido una reforma en el sistema de elección de los vocales del CGPJ.
"Evaluaremos la situación cuando hagamos el siguiente informe", que también tendrá lugar en julio, "y si es imposible implementar las recomendaciones, habrá que utilizar otras herramientas". No ha precisado más detalles, pero deja claro que es importante que el Estado que presida la Unión "dé ejemplo" a los demás miembros.