TRAS LAS PROTESTAS ANTE EL CONGRESO
La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha abogado por "abrir un debate" con el fin de "modificar" la ley orgánica que regula el derecho de manifestación, "no en el sentido de restringirlo" sino para "racionalizar el uso del espacio público".
"La ley es muy permisiva y amplia con el derecho de manifestación y cuando la Delegación ha intentado en diversas ocasiones no prohibir sino modular este derecho cambiando itinerarios o de día una manifestación porque creíamos que podía suponer un peligro de orden público, sistemáticamente el Tribunal Superior de Justicia de Madrid siempre ha fallado en nuestra contra y nos ha condenado a costas", ha añadido.
En una entrevista en una emisora de radio, ha señalado que "Madrid es una ciudad complicada" porque las "manifestaciones son permanentes", como demuestra el hecho de que en lo que va de año ha habido unas 2.200, una cifra que ha considerado "desmesurada".
Tras recordar que se trata de "un derecho constitucional que no necesita autorización previa", Cifuentes ha dicho que es necesario "compatibilizarlo con el derecho de otros ciudadanos a estar en una ciudad habitable".
En su opinión, el número actual de manifestaciones es "una cuestión puntual que viene dada por el momento político, y propiciada por grupos que tratan de conseguir en la calle lo que no han conseguido en las urnas".
Para compatibilizar el derecho a manifestarse y el de libre circulación de los ciudadanos ha planteado "cambiar la legislación", y aunque ha confesado que "no tiene claro en qué sentido" se ha mostrado partidaria "abrir un debate" en este sentido