TRAS LAS CRÍTICAS RECIBIDAS
La Casa del Rey ha afirmado que el saludo en Abu Dabi entre Juan Carlos I y el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, fue "estrictamente protocolario, sin ninguna reunión previa, ni posterior, y sin trascendencia institucional", han informado fuentes del Palacio de la Zarzuela.
Tras las críticas de Podemos y de Izquierda Unida por la foto, Zarzuela ha explicado que el saludo tuvo lugar "en el ámbito de una viaje privado", tras recordar que desde que dejó de ser jefe de Estado en junio de 2014, don Juan Carlos ha acudido todos los años invitado al gran premio de Abu Dabi de Fórmula Uno.
La Casa del Rey ha apuntado que el encuentro con el príncipe saudí tuvo lugar en la zona de autoridades del circuito. Se trató, subrayan las fuentes, de "un saludo estrictamente protocolario, sin ninguna reunión previa, ni posterior, y sin ninguna trascendencia institucional".
La CIA considera que el príncipe Salman es el principal responsable del asesinato del periodista saudí Jamal Khashoggi cometido en el consulado de este país en Estambul el pasado 2 de octubre.
El Gobierno se desmarca y califica de "casual" el saludo
El Gobierno se ha desmarcado de este asunto tras asegurar que "no es responsable de la agenda del rey emérito". El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha calificado de "casual" el saludo y ha puntualizado que no disponía información de la cita. "Ni la tenía antes, ni durante, ni creo que la tenga después", ha dicho Borrell, en una rueda de prensa con su homólogo alemán, Heiko Maas, en Madrid.
El titular de Exteriores ha recordado que el encuentro fue en el circuito donde se disputaba la prueba del Mundial de Fórmula Uno en la que el piloto español Fernando Alonso se despedía de la competición.
La portavoz del Ejecutivo, Isabel Celaá, también ha marcado distancias con el asunto: "No hemos tratado eso en el Gobierno y yo soy portavoz del Gobierno (...). Tenemos el respeto al rey emérito que se merece y nada más".
Desde Bruselas, Celaá ha declinado comentar si el Gobierno intentará que haya una foto similar entre el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, y el heredero saudí durante la cumbre del G20 que se celebrará en Buenos Aires a partir de este jueves y en la que se espera la asistencia de ambos.
En línea con Moncloa, el PSOE no ha querido entrar al fondo del asunto con el argumento de que el saludo fue captado en un "evento no oficial". "Lo más interesante es que sean otras instancias, en este caso Casa Real, la que dé explicaciones al respecto. No conocíamos este acto, que no es oficial. Solo conocemos la agenda del actual Rey. Todo lo demás es responsabilidad de la propia Casa Real dar explicaciones", ha comentado la portavoz del Comité Electoral del PSOE, Esther Peña.
El líder de Podemos, Pablo iglesias, ha opinado que el Gobierno "se equivoca al justificar" el saludo del anterior jefe del Estado con Bin Salman. "Es muy grave que la imagen internacional de España quede dañada por este encuentro. El Gobierno debe defender a España, no a la monarquía. Son cosas bien distintas", ha asegurado Iglesias en Twitter, quien horas antes había señalado, también en la red social, que don Juan Carlos "vuelve a ensuciar la imagen de España con sus amistades peligrosas".
Ciudadanos, a través de su secretario general, José Manuel Villegas, se ha unido a los reproches por considerar inoportuno el saludo. "No era el momento de que se produjera ese encuentro, ni esa foto", ha subrayado Villegas, tras recordar que hay abierta una investigación para determinar la responsabilidad del heredero saudí en el asesinato de Khashoggi con todos los "agravantes" que rodean al caso.
El candidato del PP a presidir la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, se ha limitado a decir que existe una "relación de amistad" de Juan Carlos I con el régimen saudí, gracias a la cual, España ha salido beneficiada en muchos contratos, como el del AVE a la Meca.