Justicia
El empresario ha reiterado ante el juez que se reunió con el presidente del Gobierno solo una vez en la Moncloa y lo enmarca dentro de los encuentros en materia de innovación que mantuvo con otros políticos.
El empresario Juan Carlos Barrabés ha declarado este jueves 1 de agosto ante el juez que investiga a Begoña Gómez por presunto tráfico de influencias y corrupción en los negocios.
La primera vez que fue citado por este caso fue el pasado día 15 y lo hizo como testigo. Ante el Juzgado de Instrucción número 41 de Madrid admitió que se había reunido varias veces con la esposa de Pedro Sánchez en el Palacio de la Moncloa y que en dos de esas citas estuvo el jefe del Ejecutivo.
Tras esa declaración, el magistrado le citó como investigado para el lunes, 29 de julio, pero se suspendió por causas médicas y se trasladó la declaración a hoy a las 12.00 horas.
Barrabés fue profesor del máster que codirigía la mujer del jefe del Ejecutivo y adjudicatario de una serie de contratos públicos, algunos de ellos remitidos a la Fiscalía Europea.
Actualmente hay tres investigados en la causa abierta por presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios: Begoña Gómez, Juan Carlos Barrabés y el rector de la Universidad Complutense, Joaquín Goyache -quien sí declaró el día 29 como estaba previsto- y volvió a negar que hubiera irregularidades en la cátedra que codirige Begoña Gómez y que él diera orden alguna en relación a quién debía dirigirla.
El empresario Barrabés ha explicado ante el juez Juan Carlos Peinado que se reunió con Pedro Sánchez. Pero que solo fue una vez en la Moncloa y lo enmarca dentro de los encuentros habituales que mantiene con otros políticos sobre innovación. También ha aclarado que Begoña Gómez no estuvo presente.
La declaración se ha realizado por videoconferencia, ha durado poco más de 30 minutos y ha contestado solo a preguntas de su letrado, según han informado fuentes jurídicas recogidas por 'EFE', que también comenta que mantuvo varios encuentros profesionales con Gómez porque ella le pidió ayuda para un módulo del máster incluido en la cátedra de la Universidad Complutense de Madrid y que las reuniones se celebraron tanto en Moncloa como en su empresa.
Barrabés, adjudicatario de varios contratos públicos investigados en la causa, ha insistido en que las cartas de recomendación que la esposa del presidente del Gobierno escribió no eran a su empresa sino "al proyecto", y que las gestiones de los proyectos las llevaba su equipo y no él.
En el interrogatorio también ha salido la empresa Wakalua -filial de Globalia-, con la que Begoña Gómez pudo tener relación y que está dirigida por Leticia Lauffer, quien declarará el 26 de agosto como testigo, afirma que fue un cliente en un proyecto que consideraba importante.
Al finalizar la declaración, la letrada de Vox, Marta Castro, afirma que el investigado "ha recordado mucho más" que en su comparecencia como testigo. Por otra parte, el letrado de Hazte Oír, Javier María Pérez Roldán, ha descartado realizar "valoraciones jurídicas" sobre la declaración de Barrabés "por no entorpecer la instrucción".
Fue una denuncia de Manos Limpias lo que provocó la apertura de la causa en la que acusaba a Begoña Gómez de haber actuado "prevaliéndose de su estatus personal" como esposa del presidente del Gobierno.
Según el sindicato, uno de esos empresario "beneficiados" por las "recomendaciones" de Begoña Gómez era Barrabés, a cuyas empresas se le habrían adjudicado licitaciones públicas por valor de 10 millones de euros. Sin embargo, un informe de la Guardia Civil sostenía que descartaba que la intervención de Gómez decantara adjudicaciones a empresas de Barrabés.
El presidente del Gobierno se acogió el martes a su derecho a no declarar después de que el juez Juan Carlos Peinado le hubiera citado como testigo y se hubiera trasladado hasta la Moncloa para interrogarle. Una declaración que, según cuentan, duró unos dos minutos porque se acogió a su derecho a no declarar.
Pedro Sánchez había solicitado anteriormente al juez su deseo de testificar por escrito, pero el magistrado lo había rechazado explicando que no estaba citado como testigo por el cargo que ostentaba como presidente, sino como esposo de la investigada. Poco después, la Abogacía del Estado presentó una querella en representación de Sánchez contra el juez por presunta prevaricación.
Este miércoles, el presidente defendió la querella porque, según él, "se han atropellado derechos" de la institución de la Presidencia.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com