Ley de Amnistía
Aznar apela a la sociedad civil española y a su "fortaleza" que, según el expresidente popular, "no será la primera vez que se ponga a prueba. La involución, el terrorismo y la sedición han querido frustrar nuestra voluntad de convivencia". Pide "plantar cara" e "impedir" un plan de "disolución nacional".
Este martes Aznar durante la inauguración del campus FAES 2023, ha pronunciado un crítico discurso sobre el panorama político actual. El expresidente del Gobierno, José María Aznar, ha comenzado advirtiendo de que se está viviendo "tiempos dramáticos" porque existe "un cierto riesgo existencial para la continuidad de España como nación" y ha alertado de que lo que está en marcha es "un desmantelamiento de la Constitución".
Tras unas palabras en homenaje a Josep Piqué "un amigo, patrono FAES" recientemente fallecido, ha querido recordar que antes "eran tiempos en los que los ministros viajaban a Bruselas para defender nuestros intereses y para que los prófugos de la justicia sean juzgados" y que ahora "la Vicepresidenta del Gobierno viaja a Bruselas para negociar con un prófugo el Gobierno de España".
José María Aznar considera que los pactos y las cesiones del PSOE al independentismo en los últimos tiempos, constituyen un inminente riesgo para España, "es lo más destructivo a lo que hemos asistido", que se trata sin duda de un "ataque a la Constitución", y todo por "mantenerse en el poder".
Aznar ha insistido en que las actuales negociaciones alumbran "un proyecto de desconstrucción nacional" que conllevará así mismo una "disolución nacional", y que rompe con una ley común a todos. El expresidente cree que la sociedad española "acumula energía cívica, institucionalidad y masa crítica" para impedir que este proyecto se consume. "Preciso activar estas energías, se tiene que plantar cara". De igual forma apela a la "fortaleza" de la ciudadanía española que asegura no ser "la primera vez que se pone a prueba" en momentos pasados de la historia como la del "terrorismo". Por ello incide en que "hay que decir de nuevo ¡Basta ya!, España no puede volver, ni va a volver a un sistema sectario ni a la destrucción de la nación". Durante el discurso, Aznar se refiere a la amnistía como una excusa que "además de otorgar impunidadconvierte en legítima una gravísima intentona sediciosa contra la integridad constitucional".
Además, el expresidente popular cuestiona y señala "la normalidad" con la que se asume que la gobernabilidad de España se encuentre en manos de un prófugo de la justicia como Carles Puigdemont, "no hay un estado que no avergüence a sus ciudadanos en el que se concede carta de naturaleza a un prófugo de la Justica (…) no hay nada más perverso que esta falsa normalidad con la que se quiere hacer pasar un proceso de autodestrucción constitucional". Aznar se sitúa así al frente de la línea más dura del partido "el peligro no viene de fuera. Está inducido por una fuerza política, que es el PSOE, que se ha convertido en el desencadenante de un síndrome en el que los que tienen que defender la Constitución desde el Gobierno se han convertido en sus principales atacantes".
José María Aznar llama a una movilización contra la amnistía, como la que hubo en su día contra ETA. Al Gobierno no le han gustado esas palabras de Aznar. Le acusan de tener comportamientos "golpistas".
Creen que está haciendo una llamada a una rebelión nacional y consideran que no es un simple verso suelto dentro del PP.