Partido Popular
En una charla entre Ayuso y Aznar en el marco de un máster de la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid, la presidenta de Madrid ha hablado sobre su papel de "icono" de la derecha, los indultos y la alternativa que supone para el Gobierno de España su victoria en el 4M
Isabel Díaz Ayuso, presidenta de Madrid, y Jose María Aznar, expresidente de España, se han dado cita este viernes en el acto de clausura del máster en Acción Política de la Universidad Francisco de Vitoria de Madrid, un encuentro moderado por el periodista Vicente Vallés en el que, entre otras cosas, se ha hablado sobre el rol de "icono de la derecha" de la 'popular' y del futuro de Pablo Casado como hipotético presidente del país.
"El próximo presidente de España será Pablo Casado, no yo", ha lanzado Ayuso al poco de comenzar, al ser cuestionada sobre su ascendencia en el partido y en la derecha española tras la victoria arrolladora en las elecciones de Madrid del pasado 4 de mayo, por la que fue investida la semana pasada.
Un "fenómeno social" al que también ha hecho referencia Aznar: "Voy a Hungría y me preguntan por ella, voy a Colombia y me preguntan por ella, voy a Estados unidos y ocurre lo mismo", ha dicho, señalando que la popularidad de Ayuso "es una gran ventaja para Casado" e implica "la apertura de una alternativa real al actual Gobierno de España".
Ayuso, no obstante, sí ha reconocido su papel como "ariete" del Gobierno de Pedro Sánchez. "Si yo no me rebelo, hoy la hostelería en Madrid estaría cerrada. Es lo que intentó el Ejecutivo de Pedro Sánchez hace unas semanas y por lo que tuve que recurrir a los tribunales".
"Madrid hubiese estado perimetralmente cerrada de forma innecesaria durante mucho más tiempo. Si no tomo según qué decisiones, los intereses de los madrileños, y del resto de españoles, se hubiesen visto mermados", ha señalado.
"Fue un golpe de Estado"
Otro de los principales puntos del debate ha sido el de los indultos a los líderes independentistas condenados por el procés. "La independencia es dinero, corruptela. Si pretenden que Madrid pague la fiesta de Cataluña, lo llevan claro. Los nacionalistas no quieren lo mejor para Cataluña, sino lo peor para el resto de España", ha asegurado Ayuso.
Aznar, por su parte, ha tachado lo ocurrido en octubre de 2017 de "golpe de Estado", apuntando que el Gobierno de Pedro Sánchez "está laminando ante Europa y el resto del mundo el crédito del Tribunal Supremo de España".