ADAPTARÁ LA DOCTRINA DICTADA POR EL CONSTITUCIONAL
El portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, ha destacado que las leyes las elabora el Parlamento y no los obispos, y que la reforma de la Ley del Aborto que prepara el Gobierno quizá "no guste mucho" a los prelados españoles pero es un compromiso electoral del PP. En rueda de prensa tras la Junta de Portavoces del Congreso, Alonso ha recordado que el PP se comprometió a modificar la ley para adaptarla a la doctrina dictada sobre la materia por el Tribunal Constitucional (TC) de la que, a su juicio, se había "alejado" la anterior reforma realizada por el PSOE.
"Será una reforma que quizá no guste mucho a los obispos, no lo sé, pero se aviene a la doctrina del Constitucional y a nuestros compromisos", ha reiterado Alonso, que ha recordado que los obispos tienen derecho a opinar pero no son los encargados de redactar las leyes.
Preguntado por el anuncio del PSOE de que planteará cambios en los acuerdos con la Santa Sede si el Gobierno reforma la ley de interrupción voluntaria del embarazo, Alonso ha subrayado que los socialistas siempre piden modificaciones del Concordato cuando están en la oposición, pero se olvidan de ello cuando ocupan el Ejecutivo. Además, el portavoz del PP ha defendido la vigencia del Concordato que, en su opinión, ha funcionado hasta ahora "razonablemente bien".
El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, avanzó este lunes que la reforma de la ley del aborto "llegará muy pronto" y supondrá un cambio en el sistema de plazos por otro de indicaciones legalmente previstas. El presidente de la Conferencia Episcopal, Antonio María Rouco Varela, advirtió a los políticos católicos de su "responsabilidad" cuando su acción está relacionada con principios morales que "no admiten derogaciones, excepciones o compromiso alguno" y volvió a reclamar una reforma de la legislación sobre el aborto, el matrimonio o la enseñanza.
Reacciones de los grupos parlamentarios
Los partidos de izquierdas denuncian que la Iglesia marca la agenda al Gobierno. La portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, ha acusado a la Iglesia de intentar chantajear al Gobierno del PP en el tema del aborto en pago a los "compromisos" adquiridos cuando se manifestaban juntos "del brazo y por las calles" en los años de mandato de José Luis Rodríguez Zapatero.
"No se puede modificar una ley que coarta, que elimina y que limita la libertad de ciudadanas de este país al dictado de una determinada confesión religiosa", ha subrayado Rodríguez, antes de apostillar: "Al BOE no se pueden llevar principios morales, no se puede llevar un catecismo". Tal y como ha avanzado la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, los socialistas plantearán que se cambien los acuerdos con la Santa Sede si el Gobierno modifica la ley del aborto.
El PSOE, ha agregado Rodríguez, "no va a permitir que se rompan las reglas de juego en absoluto", porque España es un país aconfesional y las leyes no se modifican "siguiendo la moral o los dictados de una determinada confesión religiosa". Y "si se rompen las reglas del juego", las normas sobre las que se ha construido el consenso y la convivencia, "el PSOE también las romperá" y planteará una reforma de todo el cuerpo legislativo que ha sustentado estas normas de juego y de consenso.