HECHOS QUE SE REMONTAN A 2011
El Parlament, el Gobierno Catalán y el fiscal han hecho frente común contra la sentencia absolutoria. El propio fiscal general del Estado anunciaba en Barcelona que se recurrirá ante el Supremo. También en la mismia línea se encuentra el presidente de la Sala que juzgó el caso, Fernando Grande Marlaska, quien emitió un voto en contra de la sentencia absolutoria, aunque quedó en minoría.
Los únicos que respaldan la decisión son la magistrada Manuela Fenández y el propio ponente de la sentencia, el magistrado Ramón Sáez Valcárcel, quienes votaron a favor. También Cayo Lara, en el programa Espejo Público, mostraba su apoyo a la sentencia absolutoria.
El PSOE no ha querido opinar sobre la polémica sentencia, solo se ha limitado a decir que respeta la decisión judicial. Por su parte, el Partido Popular celebra, en cambio, que aún no se haya dicho la última palabra sobre este caso y confía en que el Tribunal Supremo anule la sentencia ya que cree que los ataques que sufrieron los diputados catalanes no pueden quedar impunes.