POR EL 9-N LA MULTA ES DE CINCO MILLONES
Lo que costó imprimir carteles, comprar ordenadores portátiles para las mesas o crear hasta una web institucional, es decir, cada euro de dinero público invertido en la consulta del 9N, tendrá que ser devuelto por sus responsables de su propio bolsillo. Así se lo exigen a Artur Mas y sus socios el Tribunal de Cuentas.
Puigdemont acusa al Tribunal de fomentar el miedo con su mensaje, que sirve de aviso encubierto para los separatistas: Si celebran el referéndum, el president y sus consejeros responderán también ante el Estado con su capital.
El ex conseller Jordi Baiget dijo estar dispuesto ir a prisión, pero no a que tocaran su patrimonio. Por no estar dispuesto a ponerlo en peligro fue rápidamente destituido. Sin embargo, de poco le ha servido a su familia, ya que su mujer está entre los condenados a pagar por el 9N y él quedará para siempre como el primer caído de una purga que dejó fuera ejecutivo catalán a todo el que dudaba del referéndum.
Puigdemont y Junqueras responderían con sus propiedades inmobiliarias, cuentas corrientes o títulos y planes de pensiones. En total, más de 3,3 millones euros según su declaración de bienes.