Pegasus
Aragonès ha asegurado que "contra el independentismo, todo vale" y ha pedido que se asuman responsabilidades cuanto antes.
El Gobierno ha denunciado el espionaje a los móviles del presidente, Pedro Sánchez, y la ministra de Defensa, Margarita Robles, realizado con el sistema Pegasus hace un año. Dos acciones de espionaje al móvil de Sánchez en mayo de 2021, del que extrajeron 2,6 gigas y 130 megas de datos, respectivamente, y una al de Robles en junio del mismo año en la que lograron hacerse con 9 megas de datos, según fuentes del Ejecutivo. La situación resulta especialmente grave ante el enorme volumen de información que Pedro Sánchez tenía en su teléfono y que le ha sido robada, en contraste con la ministra de Defensa, que tenía muy poca, porque sigue las instrucciones del Centro Nacional de Inteligencia de no tener datos en los dispositivos móviles. De momento, sabemos que sus teléfonos han sido espiados. Pero no sabemos qué información ha sido robada, ni quién la ha robado.
A través de las redes sociales, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, ha denunciado lo que considera que es una "doble vara de medir del Gobierno central" a la hora de tomar medidas. Dice Aragonés que "todo vale" cuando el espionaje es contra el independentismo. "Todo espionaje político es de extrema gravedad. Hace días que lo denunciamos sin obtener explicaciones del Gobierno español. Cuando el espionaje masivo es contra las instituciones catalanas y el independentismo, silencio y excusas. Hoy, todo son prisas. Hay que asumir responsabilidades ya", ha subrayado. Este lunes, el independentismo ha explicado que la denuncia de espionaje al presidente del Gobierno y a la ministra de Defensa podría ser una "cortina de humo" para tapar el espionaje a más de 60 independentistas.
¿Cómo funciona?
Su funcionamiento es relativamente sencillo. El CNI envía un mensaje al teléfono que quiere espiar. Por ejemplo, una notificación de Hacienda, de la Seguridad Social o una alerta de una noticia. Si el receptor pincha el enlace, los espías tienen desde ese momento acceso a todo el teléfono: llamadas, micrófono, mensajes, fotos o correos electrónicos. También basta con dejar una llamada perdida de WhatsApp para acceder al teléfono. Todas estas acciones, en cualquier caso, las tiene que autorizar un juez del Tribunal Supremo asignado al CNI. Cabe recordar, en este punto, que es legal que el CNI espíe, siempre que el objetivo de esta acción sea prevenir y evitar peligros o agresiones contra España; pero al invadirse fundamentales relacionados con la privacidad, se requiere una autorización judicial y concreta.