MARIO SORRIBAS ANTE EL JUEZ
Mario Sorribas, quien fuera apoderado y hombre de confianza de Iñaki Urdangarin, ha afirmado, en la declaración que este lunes ha prestado como imputado ante el juez instructor del caso Nóos, José Castro, que en la mercantil Aizoon, propiedad al 50 por ciento de la Infanta Cristina y del Duque de Palma, no había trabajadores, según ha señalado a los medios la abogada que representa en la causa al sindicato Manos Limpias.
Según los investigadores, Urdangarin "interpuso" esta sociedad para facturar "ciertos servicios de carácter personalísimo", como el servicio doméstico, que nada tenían que ver con la actividad de la inmobiliaria, todo ello con el objetivo de reducir su propia tributación en la declaración del IRPF.
De hecho, la Agencia Tributaria señala cómo durante 2007 y 2008, ejercicios en los que Urdangarin habría defraudado a Hacienda al menos 240.000 euros, utilizó Aizoon como "pantalla" para tributar gastos como los de su propio servicio doméstico o los de su asistenta personal, con el objetivo de beneficiarse de un tipo impositivo inferior, el aplicado a las sociedades.
Según la letrada de la acusación popular, durante su declaración, Sorribas ha apuntado asimismo que a partir de marzo de 2006, cuando teóricamente el Duque había abandonado Nóos, continuó al frente de esta entidad así como de una de las sociedades consideradas sucesoras: Areté, y que tanto Urdangarin como su exsocio Diego Torres lideraban la Fundación Deporte, Cultura e Integración Social (FCDIS), presuntamente utilizada para desviar fondos al extranjero.
Mientras tanto, también ha sido interrogado el empresario Alex Sánchez Mollinger, en su caso como testigo, cuya relación con Aizoon, según la abogada de la acusación popular, "no ha quedado acreditada". En cualquier caso, la letrada ha apuntado que hay que estudiar toda la documentación que el testigo ha presentado esta mañana a la causa. En estos momentos está compareciendo como encausado el empresario valenciano Miguel Zorío.