POR FALTA DE SEGURIDAD
La Audiencia Nacional ha admitido a trámite una querella contra el embajador y el segundo embajador de España en Afganistán, Emilio Pérez de Agreda y Oriol Solá, respectivamente, por falta de medidas de seguridad en el atentado contra la Embajada en Kabul en 2015, en el que murieron dos policías españoles.
Se trata de un auto del juez Santiago Pedraz que admite la querella presentada por la familia de uno de los policías fallecidos presentada por supuestos delitos de homicidio imprudente y siete en grado de tentativa en relación con la falta de medidas de seguridad en el citado atentado.