NO SE HAN PROBADO LAS INTENCIONES
El juzgado de lo penal número 31 de Madrid ha absuelto al PP de destruir los ordenadores de su extesorero Luis Barcenas por falta de pruebas y a sus tres empleados por no quedar acreditado que tuvieran la intención de eliminar la información para entorpecer la investigación que se seguía en la Audiencia Nacional. En la sentencia el magistrado absuelve a los tres acusados junto al partido: la extesorera Carmen Navarro; el responsable de su asesoría jurídica, Alberto Durán; y el jefe del departamento de sistemas informáticos, José Manuel Moreno, de los delitos de encubrimiento y de daños informáticos.
En la sentencia absolutoria, contra la que cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Madrid, se considera que no ha quedado probado que Carmen Navarro hubiera tenido alguna clase de intervención activa en la autorización, adopción o ejecución de la decisión de aplicar el procedimiento de borrado seguro de los discos duros de los dos ordenadores portátiles. En la misma línea, la resolución resuelve que tampoco ha quedado probado que la intención de los acusados José Manuel Moreno y Alberto Durán -el primero al proceder al borrado y destrucción de los discos duros, y el segundo, al ordenar la aplicación del protocolo de borrado seguro implantado en el PP-, fuera la de causar un menoscabo económico a Luis Bárcenas.
La Fiscalía no acusaba al PP como persona jurídica, y en sus conclusiones definitivas pidió que se dictara una sentencia absolutoria, al igual que el defensor de la organización popular, Jesús Santos, exfiscal de la Audiencia Nacional. Para la defensa, fue importante la declaración de un perito de la Intervención General del Estado (IGAE) que consideró “poco creíble” la documentación entregada por el propio Bárcenas a la Audiencia sobre la contabilidad B del partido.