SE REANUDARÁ EL 4 DE DICIEMBRE
El abogado del expresidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont, Paul Bekaert, ha defendido el aplazamiento de la audiencia para decidir sobre su entrega a España y ha argumentado que "no es ganar tiempo", sino un trámite para garantizar el derecho de la defensa a hacer sus alegatos.
Bekaert ha dicho que "no es ganar tiempo. Es solo el derecho de la defensa a escribir sus alegatos e informar al tribunal, porque es bastante complicado, no es un caso simple". Este viernes tuvo lugar la primera audiencia del caso ante la Cámara del Consejo (tribunal de primera instancia) belga, tras la cual el juez decidió fijar una nueva cita el 4 de diciembre para que hagan sus alegatos tanto la defensa como la Fiscalía de Bruselas, que ayer pidió la ejecución de las euroórdenes contra Puigdemont y sus exconsejeros por todos los cargos salvo el de prevaricación.
"Para los tribunales belgas 14 días es (un plazo) muy corto", ha dicho el abogado en referencia al tiempo transcurrido entre que la Fiscalía belga recibió las órdenes de detención y entrega el 3 de noviembre, y la audiencia celebrada ayer.
El letrado ha insistido en que "es normal" que defensa y Fiscalía presenten sus alegatos por escrito, pero ha rehusado precisar cuándo entregará el equipo defensor estos argumentos al juez. Tampoco ha desvelado si habrá cambios en su estrategia de defensa por "respeto" al tribunal, ha dicho. Corresponde a la defensa presentar en primer lugar sus alegatos, a los que después puede responder la Fiscalía, cuyas conclusiones pueden a su vez ser contestadas de nuevo por la defensa, ha explicado Bekaert. Esto debe ocurrir como tarde el 4 de diciembre, cuando tendrá lugar la vista oral tras la cual el juez deberá pronunciarse sobre las euroórdenes cursadas por España.