Mesa electoral
Las juntas electorales empiezan a recibir alegaciones de quienes tienen que asistir a las mesas electorales. La mayoría de las excusas tienen que ver con el cuidado de personas a cargo, enfermedades o viajes programados.
Los ciudadanos empiezan a recibir las notificaciones para asistir a la mesa electoral el próximo 23 de julio y en las oficinas de la Junta Electoral, muchos han presentado sus alegaciones para intentar librarse. Vienen cargados de papales, todo lo que haga falta para demostrar que les es imposible estar ese día.
A Antonio le ha tocado ser suplente, pero tiene dos hijos y nadie puede hacerse cargo de ellos. Ambos son menores de 14, por lo que su falta en la mesa estaría justificada. Sin embargo, el próximo 23 de julio tendrá que asistir al colegio electoral. "Presenté los documentos que yo consideraba, porque nadie me dijo qué tenia que llevar y me lo han denegado", explica. Le piden que demuestre que no puede dejar a sus hijos con nadie, pero él nos cuenta que está divorciado y no tiene familia donde vive. "No puedo demostrar algo que no existe, me parece una injusticia", asegura. No le dan posibilidad de recurso, así que no le queda otra que asistir el domingo y si hace falta dice, irá con ellos a la mesa.
Ante las oficinas de la Junta Electoral vemos un trasiego continuo de personas a las que les ha tocado por sorteo y vienen a intentar excusarse. "Estoy a cargo de mi madre, así que o contrato a una persona o me la llevo conmigo a la mesa electoral", "yo tenía un vuelo desde enero a Praga y me han notificado que tengo que estar en el colegio ese día", nos cuentan mientras esperan para presentar sus alegaciones. La mayoría espera tener suerte.
Sin embargo, Andrea asume que lo tiene muy complicado. Sacó un viaje a Galicia un día después de la convocatoria electoral. "Vengo llorando", asegura. Dice que lo ve bastante difícil y que ya está pensando en el verano que viene.