Oso
El oso no podía ver, comer, ni beber por el bidón que tenía encajado en su cabeza. Fue necesario sedarle para que el equipo veterinario le liberara.
Un oso pardo ha salvado la vida tras un angustioso rescate en Anllares de Sil, en León.El animal fue avistado por un vecino de la zona que avisó para que un equipo especializado pudiera ayudarle.
La Junta de Castilla y León se encargó de enviar, de inmediato, a agentes medioambientales, al equipo de las Patrullas Oso de la Fundación Patrimonio Natural de Castilla y León y a los veterinarios de la red de centros de fauna de la Junta. Estos últimos son losencargados del plan de captura y radiomarcajede osos pardos en la Comunidad.
Los veterinarios tuvieron que disparar al oso con un dardo anestésico. Cuando llegaron el ejemplar estaba muy nervioso.
En solo 12 minutos el animal quedó sedado profundamente para que se pudiera proceder a quitarle el bidón de plástico que tenía atrapado su cabeza.
El oso, un macho de 98,5 kilogramos de peso y sin signos de deshidratación, pudo ser liberado sin mayor complicación.Finalmente, el equipo que acudió en su ayuda, le colocó un collar para su geolocalización y terminaron la intervención tomándole medidas biométricas y muestras biológicas. Acto seguido, fue liberado.
Por desgracia no es la primera vez que se graban rescates de este tipo debido a la acumulación de plásticos tanto en los montes como en los océanos. El pasado mes de enero, en Michigan, los equipos de rescate retiraron en solo 3 minutos un cubo de plástico de la cabeza de un cervatillo que llevaba dos semanas con él.
Y en Argentina, encontraron un lobo marino con una herida en el cuello provocada por una brida de plástico. La herida estaba infectada y era más profunda en la garganta.