Guerra en Ucrania
A pesar de la liberación de la ciudad hace unas semanas, Rusia la sigue considerando suya y la bombardea con decenas de muertos
Rusia no descansa y sigue bombardeando ciudades ucranianas. El ejército ruso ha aumentado los ataques en la ciudad de Jersón. Ahora, ha dejado más de 30 civiles muertos tras un continuo bombardeo. Poco ha durado la alegría de la liberación de la ciudad. Ésta llevaba ocupada 8 meses y Rusia ordenó su retirada el pasado 9 de noviembre. Pero al Kremlin no le ha servido de nada y ha atacado el puente de Jersón. Ante esta situación, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha pedido a su población que se prepare ante la grave realidad que les está tocando afrontar.
Solo en las últimas horas, decenas de ucranianos han muerto. La ciudad de Jersón está devastada. Las autoridades de Ucrania han decidido evacuar a los civiles que quedaban en la ciudad. Éstos se han visto obligados a huir. Tanto los trenes como los autobuses han ido repletos de gente para salir de la ciudad. También se han visto largas caravanas de coches en las carreteras. "Antes de ayer destruyeron mi casa y ya no se puede vivir allí", ha afirmado Vitali, un ciudadano ucraniano dispuesto a huir en coche con su familia.
El frío, una nueva amenaza
"Sin luz, ni agua, ni calefacción", ha añadido Vitali. A parte de la violencia, las condiciones climáticas invernales son otro factor que empeora la situación de los ucranianos. No solo tienen la ciudad destruida, sino que los ciudadanos tampoco disponen de las condiciones energéticas óptimas para sobrevivir. Además, esto también está afectando negativamente a las tropas situadas en el frente de guerra. Tanto de un bando como de otro.