Incendios
La Junta de Andalucía ha desactivado el nivel 1 del Plan de Emergencias por Incendios Forestales en su fase regional por el incendio declarado el pasado jueves en Almonaster la Real, en Huelva. El fuego ha arrasado más de 12.000 hectárea y ha provocado que más de 3.000 vecinos de varias localidades tuvieran que ser desalojados ante el temor de que las llamas llegaran a sus viviendas. La mayoría han podido ir regresando a sus casas y ahora, lo podrán hacer también los 1.300 vecinos que quedaban por reubicarse.
En estos casos se debe seguir las recomendaciones de las autoridades para facilitar el trabajo de los bomberos y evitar en todo momento acercarse a las zonas afectadas, pero en ocasiones la curiosidad de las personas puede ponerles en un serio peligro. Asimismo, los efectivos de emergencias no son los únicos que forman parte de la labor de extinción de un incendio, también los ciudadanos deben ser parte colaboradora, y en muchas ocasiones no actuando.
Algunas personas se acercan a las zonas afectadas para curiosear y eso es "tremendamente peligroso porque colapsa el sistema y no podemos entrar", asegura Federico Grillo, coordinador de Emergencias del Cabildo de Gran Canaria. Explica que en ocasiones la unidad que trabaja en apagar el fuego "al final está todo el tiempo quitando a la gente de en medio".
Por otro lado, muchas personas suben a redes sociales vídeos o imágenes de incendios con información errónea y poco rigurosa, que finalmente acaba siendo perjudicial. Emilio Duch Ramos, Director Gerente del Consorcio de Emergencias de Gran Canaria, explica: "Lo que llamamos incendios 2.0 son esos incendios que se producen en las redes sociales, paralelos y que condicionan de manera importante la toma de decisiones de los responsables políticos y los técnicos y que pueden suponer una gran presión a la hora de resolver una emergencia".