CON UNA INVERSIÓN INICIAL DE 1.500 MILLONES DE DÓLARES
La petrolera YPF, controlada por el Estado argentino tras la expropiación del 51 % de las acciones al grupo español Repsol, ha anunciado un acuerdo con Bridas, de capitales argentinos y chinos, para la explotación de hidrocarburos no convencionales en Argentina. El acuerdo, notificado a la Bolsa de Buenos Aires, es para la explotación conjunta de un área del gigantesco yacimiento de Vaca Muerta, en el suroeste de Argentina.
La inversión inicial será de 1.500 millones de dólares. El convenio le da a Bridas un período de exclusividad de 60 días para negociar los términos y condiciones finales por los cuales YPF cederá el 50 por ciento de su participación en las áreas Bajada de Añelo y Bandurria. Estas áreas, con presencia mayoritaria de "shale oil" (petróleo no convencional), comprenden una extensión de 201 kilómetros cuadrados y 462,4 kilómetros cuadrados, respectivamente, ambas en la provincia de Neuquén (suroeste).
"Inicialmente YPF cedería un total de 183,6 kilómetros cuadrados por los cuales Bridas se compromete a realizar las erogaciones correspondientes a los respectivos porcentajes de participación de YPF y Bridas en la inversión inicial del programa de desarrollo, estimada en 1.500 millones de dólares, durante un período de 24 meses", dice la petrolera argentina en un comunicado remitido a la Bolsa.
Asimismo, el acuerdo prevé que, con el objetivo de ser invertidos en las siguientes fases de desarrollo, Bridas proveerá financiación para YPF por 500 millones de dólares. Bridas, participada por la china CNOOC y la familia argentina Bulgheroni, es dueña del 40 por ciento Pan American Energy, que, después de YPF, es la segunda mayor productora de petróleo de Argentina y en la que la mayoría accionarial (60 por ciento) está en manos de British Petroleum (BP).
YPF había firmado ya el pasado día 19 un convenio con la estadounidense Chevron para la explotación conjunta de petróleo no convencional las áreas de Loma La Lata Norte y Loma Campana, también en Vaca Muerta, con una inversión prevista de 1.000 millones de dólares. La petrolera YPF está bajo control del Estado argentino desde mayo pasado, después de que el Parlamento argentino aprobara una ley para expropiar el 51 % de las acciones a Repsol, que mantiene una participación del 12 % en la mayor productora de hidrocarburos de Argentina.