EN UNA ENTREVISTA EN 'IL CORRIERE DELLA SERA'
El ministro griego de Finanzas, Yanis Varufakis, asegura que su Gobierno no descarta celebrar unas nuevas elecciones o un referéndum sobre el euro si Grecia no alcanza un acuerdo con los socios de la Unión Europea que ayude al país heleno a salir de la crisis y a fomentar su crecimiento.
En una entrevista que publica el diario italiano 'Il Corriere della Sera', Varoufakis explica que si Bruselas no acepta el plan propuesto por Grecia "podrían existir problemas". "Como ya ha dicho el primer ministro (griego, Alexis Tsipras), no estamos pegados a los asientos. Podemos celebrar de nuevo las elecciones. Podemos convocar un referéndum sobre el euro", afirma Varukafis.
El titular de Finanzas rechaza la posibilidad de que el estado heleno pueda pedir un nuevo préstamo a sus socios europeos porque lo que quiere su país es que la UE y Grecia alcancen un acuerdo que permita a este último país "crecer y terminar con la crisis humanitaria" que sufre.
En cuanto a la reestructuración inteligente de la deuda, una opción que no contempla el Eurogrupo, Grecia considera esencial "ampliar los plazos de vencimiento de los pagos y una disminución de las tasas de interés".
"¿Qué es esto sino una reestructuración?. La alternativa que proponemos no tiene el objetivo de que otros países paguen nuestra deuda, es más, proponemos remunerar más los préstamos", asevera. Esto se consigue, prosigue Varufakis, con "la sustitución de los títulos de deuda actuales vinculados al crecimiento nominal", es decir, que "si el país crece, paga un interés más alto, y si no crece, paga menos".
Respecto al superávit del presupuesto revisado, el ministro heleno comenta que va ligado a la inversión, pues "cuanto mayor sea la inversión, más superávit habrá". Y para que esto ocurra, señala que es esencial el papel que debe jugar el Banco Europeo de Inversiones (BEI) que, a su juicio, debería potenciar "que los inversores ayuden a desarrollar buenos proyectos".
Finalmente, Varufakis dirige dos críticas contra Europa, en primer lugar, lamenta que en los últimos años "se haya puesto todo el peso en las espaldas de las clases más pobres", y condena el eterno debate sobre si Grecia saldrá o no de la zona euro. "¿Quien va a venir a invertir en Grecia si se habla continuamente de 'Grexit' (juego de palabras entre Grecia y 'exit' en inglés, que significa salida). Hablar de 'Grexit' es venenoso", concluye el ministro griego.