SERÁN REUBICADOS EN OTROS VUELOS
"Queremos volar, queremos volar, queremos volar" gritan los 200 pasajeros que este viernes pensaban viajar en avión de Florencia a Madrid. Debían haber salido a las once y media de la mañana y ya estaban en el avión cuando el piloto les hizo desembarcar.
La tripulación había superado el máximo de horas de trabajo permitidas: "Nos ha dicho el comandante que por exceso de horas de la tripulación nos teníamos que bajar".
"Vueling nos ha dejado tirados, después de tenernos una hora en el avión nos han bajado diciendo que en hora y media nos iban a meter en otro vuelo, cinco horas después seguimos esperando", afirman enfadados.
La primera propuesta de la compañía aérea no convenció a ningún pasajero: "Una opción era viajar en autobús hasta Madrid, que son 23 horas de viaje sin parar, cosa que hemos dicho que no estábamos de acuerdo en absoluto".
Los nervios y el cansancio elevaban la tensión. La Policía italiana evitaba que algunos pasajeros bloquearan los mostradores de facturación. La compañía les ha propuesto diferentes soluciones siempre en vuelos con escalas y parte de los trayectos en autobús, separando a los pasajeros. Algunos podrían llegar el domingo por la noche a Madrid. Ha sido imposible obtener una versión de Vueling.