Informe
Hace más de un año que Verónica, una trabajadora de IVECO, de 32 años y con dos hijos se quitó la vida. Su suicidio se relacionó directamente con la difusión entre los empleados de la compañía de vídeos sexuales suyos.
Ahora, Inspección de trabajo cierra el caso y exculpa a la empresa de tener ningún tipo de responsabilidad en su muerte.
Trabajo exculpa a la empresa y cierra el caso
El informe de Trabajo sostiene que a la víctima "no le afectó" que los vieran sus compañeros y que solo temía que lo supiera su marido. Añade además que "su única preocupación" los días antes de ahorcarse fue que la empresa le concediera un cambio de turno para cuidar a sus hijos, algo que consiguió justo el día anterior a su fallecimiento.
Los teléfonos eran particulares, no de empresa
En este informe se añade que como los teléfonos donde se difundieron los vídeos no eran coorporativos de la empresa sino de uso particular, ese dato exonera a IVECO de tomar medidas.
Por su parte, Comisiones Obreras, sindicato que presentó la acusación contra la compañía, señala que el acoso era conocido por la empresa, que Verónica se lo comunicó a la misma y esta no activó ningún protocolo para ayudar a la joven.
Es el segundo cierre del caso Iveco, el juzgado número 5 de Alcalá de Henares decidió sobreseer la investigación penal por falta de autor conocido y porque la mujer no había planteado denuncia ni ante la policía ni en el juzgado.