No hay citas
España crea más empleo público que nunca, y tiene más funcionarios que nunca, pero llama la atención que muchos de los servicios que usamos están colapsados. Es el caso de las comisarías para renovar el DNI o pasaporte.
Hemos hecho la prueba en varias comisarías de toda España, y en muchas nos ha saltado este mensaje: "No hay citas, disponibles". Los sindicatos denuncian que las oficinas están saturadas y que el sistema informático tampoco funciona demasiado bien. Sorprende que esto siga pasando en un momento en el que la transformación digital está a la orden del día en nuestro país.
Renovar el DNI o pasaporte es una odisea. Muchos ciudadanos nos cuentan que han tardado dos o tres meses en conseguir una cita para renovar estos documentos. Incluso, que en muchas ocasiones, la web no funcionaba. Por teléfono, tampoco es fácil. Una mujer cuenta desesperada que se le cortaba constantemente la llamada y que estuvo hasta once horas para conseguirlo.
Muchas personas denuncian que el DNI es un documental necesario para cualquier gestión del día a día. Incluso para viajar. "Tienes que rogar si tienes el pasaporte caducado y se te presenta un viaje", nos dice una mujer. Otra asegura que al final no pudo sacar las billetes de avión porque le daban cita para renovar su pasaporte dos meses más tarde del viaje.
Pagar en metálico el trámite
Otro problema añadido. A la hora de pagar esos trámites, que debe ser en metálico. Mucha gente asegura que "no se entiende, porque ya casi nadie lleva dinero en efectivo".
Algo que llama bastante la atención cuando ya casi todo podemos pagarlo con tarjeta...en el taxi en la compra, en la suerte. Un hombre en una puerta de la comisaría dice que trae el dinero justo, los doce euros, que le cuesta la renovación del DNI. Otro hombre no llevaba en metálico y ha tenido que ir corriendo a un cajero para sacar dinero.
Burocracia, colapso en las comisarías y también en la aplicación. Javier Cruz, portavoz del CSIF, dice que los constantes fallos informáticos que se vienen produciendo desde el mes de diciembre impiden una atención ágil y de calidad. Unos fallos que afectan a unas 50 mil personas al día
Un sistema, dicen los funcionarios, que está obsoleto. No entienden que la transformación digital aquí no llegue.