Rebajas
La inflación va a determinar en gran medida el gasto de los españoles de cara a las rebajas de verano, que se situará en torno a los 100 euros por persona.
Comienzan unas rebajas de verano marcadas por un contexto económico en el que la inflación es la gran protagonista. Y eso a pesar de que, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el precio de los productos, sobre todo en artículos de ropa y calzado, haya bajado un 0,8% en lo que va de año. Sin embargo, el IPC ha seguido subiendo desde enero de 2023, lo que supondría un 1,7% más.
Esta realidad económica ha repercutido significativamente en las finanzas de las familias: tres de cada cuatro núcleos familiares viven al día y les es imposible ahorrar. De esta forma, lo que hacen es aprovechar los descuentos de las rebajas para comprar esos productos que no habían podido adquirir con anterioridad, ahora a un precio menor.
El año pasado, las compras que se efectuaron durante el periodo de rebajas de verano cayeron en un 0,2%. Y este año lo que se prevé es que cada ciudadano gaste, aproximadamente, unos 100 euros a lo largo de estos meses de rebajas. No obstante, hay muchos que ya han superado ese límite en tan solo tres días.
El comercio online sigue ganando terreno al físico. Tanto es así que muchas tiendas de ropa de marcas reconocidas se quedaron sin 'stock' en tan solo unas pocas horas después de que arrancaran los descuentos.
Este es un tema que se lleva tratando desde hace tiempo: cada vez más los ciudadanos prefieres ahorrarse el paseo a las tiendas. "Hay mucha gente, prefiero comprar por internet", cuentan los clientes habituales ante las cámaras de Antena 3 Noticias.
Lo que sí se espera es que la afluencia del turismo extranjero, que justo ha coincidido con estas fechas clave, pueda compensar la balanza para el sector y que su facturación pueda llegar a compensar el menor atrevimiento del consumidor local, que, por el alza de los precios, alquileres e hipotecas, tiene que privarse un poco más en estas rebajas de verano.