Rajoy ha avanzado en Puertollano, a donde ha acudido a un almuerzo con la secretaria general,
María Dolores de Cospedal, y con decenas de militantes, las premisas del discurso que este miércoles defenderá ante Zapatero.
Según sus palabras, el presidente del PP
dirá al jefe del Gobierno que España no es Grecia, pero también que si el país helénico ha llegado a la situación en la que se encuentra ahora es por poner en práctica las políticas que ahora hace Zapatero.
Éste será otro de los argumentos que mañana esgrima Rajoy, para quien es urgente "cambiar ahora" de política económica para evitar las circunstancias
que padece Grecia, a la que la UE y el FMI prestarán 110.000 millones de euros para su rescate financiero.
Por esta razón, ha señalado, España se enfrenta al "serio riesgo de caer en una
etapa de estancamiento que puede durar mucho" y no favorecer la creación de empleo. Asimismo, le advertirá de que si no adopta las medidas que requiere la economía, otros organismos "decidirán por él" y entonces "las cosas serán más duras".
"Ahora le obligan a Grecia a hacer cosas que afectan a los pensionistas, a los funcionarios... Ahora
deciden por Grecia el FMI y la UE, y yo no quiero que nadie decida por mi país, sino el Gobierno de España y las Cortes Generales", ha resumido.
Todo ello se lo va a contar este miércoles el líder de los populares dentro del clima de "desconfianza" que afecta a los ciudadanos, precisamente por la gestión del presidente del Gobierno.
Pero, como ha explicado Rajoy,
éste no es un discurso nuevo en él, pues, como ha recordado, esta petición es la misma que viene reiterando desde la investidura de Zapatero hace dos años, la cual consiste en llamar la atención sobre que estos dos últimos años han sido "años perdidos", primero por "negar la crisis y luego por no hacer nada".