Ingreso mínimo vital
El gobierno de España prevé poner en marcha en mayo el ingreso mínimo vital destinado a los hogares más vulnerables, una renta con la que ya cuentan varios países. Se trata de un ingreso para los hogares que más lo necesitan pero renta básica no hay, existen tantos modelos como países.
En Portugal, la ayuda puede llegar a los 300 euros para los que tienen un hijo a cargo y dura 12 meses aunque aunque puede extenderse. Eso sí, se exige que el beneficiario se encuentre en búsqueda activa de empleo.
Algo que no ocurre en Francia, donde también pueden optar a ella los que tengan ingresos bajos a pesar de estar trabajando. Tienen que ser mayores de 25 años y como poco reciben 550 euros, una cifra que va aumentando en función de los hijos que tengan a cargo.
En Italia, la prestación puede llegar hasta los 780 euros. Entre los requisitos para optar a ella, se exige tener la nacionalidad o haber residido 10 años en el país y, además, quien la reciba, no podrá dejar de buscar trabajo.
Otra cosa es la renta básica universal que probó Finlandia, que escogió al azar a 2.000 ciudadanos desempleados y durante dos años les ingresó 560 euros mensuales sin ningún tipo de condición. El experimento no terminó con los resultados esperados.