¿Por qué no se nota la bajada de la inflación en la cesta de la compra?

El IPC se frena al 3,3% en marzo, la tasa más baja en año y medio, sin embargo en la calle no se nota esta bajada, ¿por qué? La respuesta la tienen los números y es que en realidad los precios han subido un 0'4% el último mes pese a que la inflación en este mes registra una caída interanual de casi 3 puntos. La razón es que bajó el precio del gas, la energía y los carburantes. Otra cosa distinta es lo que ha ocurrido con la inflación subyacente, que no tiene en cuenta los precios de esas partidas y sigue en el 7,5%. Cosas de la estadística.

La explicación de por qué el dato del IPC ha bajado tanto está en que el porcentaje se compara con el del mismo mes del año pasado. ¿Y qué ocurrió entonces? que se declaró la guerra de Rusia y Ucrania. Fue un mes inusual, la energía se disparó por la invasión rusa.

En la calle lo cierto es, que salvo en productos concretos, la gente no percibe que los precios se moderen. La inflación recorta el consumo de carne, pescado, frutas y verduras. Seguimos privándonos de cosas a la hora de meter productos en la cesta de la compra y es que España está más expuesta a la inflación de los alimentos que en la eurozona, porque nuestro gasto en comida es mayor. Un informe del Banco de España destaca que la comida representa el 25% del gasto familiar, frente al 21% de media de la UE.

Respecto al mes de enero, la cesta de la compra con el IVA bonificado por el Gobierno ya sube un 2,93%. Y en productos concretos por ejemplo el precio de las patatas se ha disparado en un 22% con relación al mes pasado, seguido del 6,22% del arroz. Los artículos que más bajan con relación al mes pasado son los huevos, un 7,25%, seguido del aceite de girasol, un 6,75% y de los plátanos, 5,93%.