Coronabonus
Hasta ahora se había hablado de eurobonos. Con poco éxito porque no se han llegado a aceptar por los países que defienden más estrictamente la estabilidad de las cuentas y no extender el endeudamiento. Ahora se habla de 'coronabonos', lo mismo, pero aplicado a esta crisis, como fórmula de financiar el incremento de gasto al que tienen que hacer frente los países. Serían títulos de deuda pública, que emitiría la zona euro, el conjunto de todos los países. Cada bono representaría una cierta cantidad de dinero que compra un inversor y que debe devolver el deudor (los países), en un cierto tiempo y con el interés marcado. Las reticencias de algunos países vienen del hecho de que los 'coronabobos' deberían estar avalados por el conjunto de países que los compartan, y no por los países individuales, como ahora pasa con la deuda emitida por cada Estado.
¿Qué decidirá el Eurogrupo?
Los ministros de Economía y Finanzas de la zona euro (Eurogrupo) se reúnen en una nueva videoconferencia en la que exploran nuevas vías de respuesta a las consecuencias económicas del coronavirus mientras aumentan las voces que piden la puesta en marcha de eurobonos y la participación del fondo europeo de rescates. El presidente del Eurogrupo, Mário Centeno, señaló que el principal objetivo será "considerar opciones para añadir una línea de defensa" a la respuesta comunitaria al brote de Covid-19. Así, el objetivo de los ministros de Finanzas de la zona euro es encontrar herramientas que sumar a los planes de estímulo nacionales, a la compra masiva de deuda pública y privada anunciada por el Banco Central Europeo (BCE), a los 37.000 millones en fondos europeos que la Comisión Europea quiere movilizar y a las líneas de inyección de liquidez a través del Banco Europeo de Estabilidad (BEI).
El encuentro se producirá en un contexto en el que ha crecido el número de voces que reclama la emisión de eurobonos, títulos de deuda europea mutualizada. Entre ellas, la propia presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, o el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que abogó también por un 'plan Marshall' europeo. Sin embargo, a la dificultad técnica que supondría poner en marcha ahora este tipo de instrumentos de deuda (o "coronabonos", como se les está llamando en el contexto actual), se une el hecho es una idea que históricamente han rechazado de plano países como Alemania y Países Bajos. "Realmente se interpone en el camino hacia el consenso con respecto a medidas adicionales", han apuntado fuentes holandesas, tajantes en su rechazo a esta medida.
Prefieren un fondo europeo de rescates
Por el contrario, suena con más fuerza la posibilidad de que la UE recurra al fondo europeo de rescates -el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE)- para que pueda dar créditos de emergencia a los países con más problemas. El debate, sin embargo, está en la condicionalidad vinculada a estos créditos o líneas previas a un rescate. La capacidad de préstamo disponible de este organismo asciende a 410.000 millones. Estos préstamos a través del MEDE son la vía preferida por Países Bajos y también por Alemania. Según ha publicado la agencia de noticias Bloomberg, Berlín estaría dispuesta a canalizar un préstamo de emergencia a Roma con una condicionalidad "mínima". Además, la activación de una línea de crédito a un país a través del MEDE abriría la puerta a que el BCE pueda resucitar su programa de compras ilimitadas de deuda pública (OMT, por sus siglas en inglés), diseñado durante la crisis económica aunque nunca fue utilizado.