COMPRA DE OPEL A GENERAL MOTORS
El presidente de PSA Peugeot Citroën, Carlos Tavares, envió, al anunciar la compra de Opel a la estadounidense General Motors (GM), un mensaje de tranquilidad a los trabajadores españoles de todas las marcas de su nuevo grupo. "Estén tranquilos", dijo Tavares en español durante la conferencia de prensa organizada en París junto a la responsable ejecutiva de GM, Mary Barra. El directivo del grupo automovilístico francés dijo que en cuanto su agenda se lo permita visitará la planta de Opel en Figueruelas (Zaragoza).
Destacó que PSA, gracias a "una implantación muy fuerte en España" con sus factorías de Vigo y Madrid, conoce "todas las calidades que tiene el país", que son las que le han permitido que la producción automovilística haya aumentado estos últimos años. Por eso, repitió a los trabajadores "que estén tranquilos porque lo que buscamos juntos es la eficiencia". "En España -remachó- tenemos colaboradores de calidad".
Tras una larga serie de preguntas sobre si el nuevo grupo tendrá que cerrar plantas o reducir su plantilla, explicó que cada factoría debe plantearse el reto de la eficiencia, que se mide en la mejora de la calidad, en la reducción de costos y en el cumplimiento de los objetivos. Insistió en que se respetarán todos los acuerdos existentes, en particular con los sindicatos -por una cuestión de deontología-, y que a más largo plazo el futuro estará en las manos del trabajo conjunto de la empresa con los trabajadores para mejorar los niveles de eficiencia.
Un método -indicó- que es el que ha aplicado en PSA en los últimos cuatro años para sacar el fabricante de la difícil situación en la que estaba, al borde de la desaparición Tavares, que desde el anuncio de las negociaciones con General Motors a mediados de febrero se ha entrevistado con los primeros ministros de Francia, Bernard Cazeneuve, Reino Unido, Theresa May, y con la canciller alemana, Angela Merkel, se excusó al ser preguntado por España, por "no haber podido estar en todas partes estos últimos días".
Pero avanzó que en la conversación con Rajoy le va a transmitir el mensaje de que PSA no tiene planes ocultos, y que irá a Figueruelas cuando su agenda se lo permita. La compra de Opel/Vauxhall, que incluirá la filial financiera de GM en Europa, supondrá un pago de 2.200 millones de euros en dos operaciones paralelas. La primera pata será la adquisición por PSA de la actividad automovilística del grupo estadounidense en Europa (las marcas Opel y Vauxhall) por 1.300 millones de euros, y la segunda la de esa filial financiera por 900 millones, mediante una alianza a partes iguales entre PSA y el banco francés BNP Paribas.