Despido improcedente
El Tribunal Superior de Justicia de Madird (TSJM) ha calificado de improcedente el despido de una trabajadora que se cogió vacaciones tras ser autorizada por WhastApp.
La mujer trabajaba en una tienda como dependienta desde 2006. En la empresa era habitual pedir y confirmar las vacaciones por WhatsApp.
La mujer decidió pedir por WhatsApp unos días libres para solucionar un problema con la custodia de su hija. Según informa 'Economisy&Jurist' la empresa le respondió con un “Haz lo que quieras”.
Tras las vacaciones la empleada tuvo que cursar una baja por incapacidad por contingencia común que se extendió durante mes y medio. Tras su reincorporación se le comunicó el despido disciplinario procedente.
La justicia obliga ahora a readmitir a la empleada o indemnizarla con 20.000 euros. Sin embargo, la empresa recurrió y el TSJ le volvió a dar la razón a la empleada.
El TSJ explica que en en ningún momento el encargado deniega los permisos, sino que de acuerdo con la conversación se deduce que se hace cargo de la ausencia de la trabajadora.