EN ESPAÑA
Los diputados del Congreso en nuestro país no predican con el ejemplo. Ninguno tiene un coche eléctrico. En febrero, el Gobierno modificaba su prohibición a los vehículos diésel que había propuesto para 2040 a proponerlo como un 'objetivo'.
Si hablamos de los miembros que forman el Gobierno, la vicepresidenta, Carmen Calvo, tiene un Micra de hace 13 años, la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, un Audi, diésel de 21 años y la de transición ecológica, Teresa Ribera, la del "diésel tiene los días contados", tiene un Peugeot 307 de 12 años.
Solo Isabel Celaá, la portavoz de Gobierno tiene un híbrido.