Coronavirus
Fernando Simón se reincorporaba este lunes a las ruedas de prensa diarias sobre la evolución del coronavirus y con él ha vuelto la polémica. El PP ha pedido al gobierno que desautorice al director de Alertas del ministerio de Sanidad y la organización que representa a los empresarios y profesionales del sector turístico, la Mesa de Turismo ha pedido que sea destituido inmediatamente.
Simón abordó las restricciones de algunos países en las visitas a España de sus ciudadanos. El director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias hizo su una valoración polémica cuando se refirió al asunto asegurando que es mejor que los ciudadanos de Bélgica, cuyo gobierno les ha recomendado no visitar España, no vengan porque es un "riesgo que nos quitan".
También buscó el lado positivo de la cuarentena británica: "desde el punto de vista sanitario estas decisiones nos ayudan"
Dicho esto, ha recordado que no en todas las zonas de Bélgica o Reino Unido están en la misma situación respecto a la transmisión del coronavirus, como tampoco lo están las diferentes regiones de España.
El sector turístico "profundamente indignado"
La Mesa de Turismo, que representa a empresarios y profesionales del sector, ha criticado las palabras de Fernando Simón, y ha pedido al Gobierno su destitución inmediata.
Sus integrantes están "profundamente" indignados con las palabras en las que agradecía a Bélgica y el Reino Unido que desincentiven los viajes a España, ya que se reduce el riesgo de casos de coronavirus importados.
Le recuerdan que las restricciones suponen "una grave amenaza para el turismo" y aseguran que son palabras "son totalmente intolerables". No pueden entender "cómo una persona que demuestra este profundo desconocimiento acerca de la economía y el funcionamiento de un país puede ocupar un puesto político que pagamos todos los españoles".
Advierten de que de no tomarse medidas inmediatas, la paralización del turismo puede suponer la pérdida de más de 90.000 millones de euros a finales de septiembre y hasta 120.000 millones de euros de pérdidas y la destrucción de cerca de 1,5 millones de empleos a final de 2020.