CIERRA CON UN ALZA DEL 1,32%
La mayor parte de los mercados respondían con fuertes caídas a la dimisión de Papandréu y, de hecho, las dudas sobre la situación de crisis en Italia provocaron una apertura en negativo de Milán. Sin embargo, los rumores de una posible dimisión del primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, animaron la bolsa, que llegó a elevarse hasta un 2,43% a media sesión.
A lo largo de la tarde, el desmentido de Berlusconi redujo el optimismo, pero no evitó el cierre de Milán en positivo. Su índice selectivo, FTSE MIB, avanzó un 1,32 %, hasta situarse en los 15.548,94 puntos. Por su parte, el índice general FTSE Italia All-Share ganó un 1,10 % y cerró en los 16.381,14 puntos.