Mercadona
La empresa de supermercados Mercadona proporcionará alimentos frescos a la congregación Las Hermanitas de los Pobres de Sevilla para que puedan repartir comida entre los ancianos a los que atienden.
La cadena de supermercados Mercadonadonará alimentos frescos y de proximidad a la residencia de ancianos Las Hermanitas de los Pobres de Sevilla todos los días para que la congregación religiosa atienda a las personas mayores que cuidan en el centro.
La congregación se mantiene económicamente gracias a las prestaciones sociales y a las donaciones de empresas e individuos. Para ingresar en la residencia de ancianos, tienen preferencia los solicitantes con ingresos muy bajos.
Las Hermanitas de los Pobres se dedica al servicio de ancianos desde que se fundó en Francia en 1839 y, desde que llegó a España en 1863, cuenta con cerca de 30 centros de mayores repartidos en el país.
130 toneladas de alimentos en siete meses
"En estos momentos de crisis agradecemos a Mercadona que se haya acordado de nuestros pobres porque para ellos vivimos, para cuidarlos. Necesitamos de la ayuda de empresas como Mercadona, que también nos ha ayudado en otras ciudades", ha destacado la madre superiora de la congregación Las Hermanitas de Los Pobres en Sevilla, Sor Catalina en un comunicado sobre la donación de alimentos.
La directora de Relaciones Externas de Mercadona en Sevilla, Marta Rosa, ha indicado que la empresa "intensifica su modelo responsable colaborando con los bancos de alimentos, comedores y otras entidades sociales de Sevilla, provincia en la que ha donado, en lo que va de año 2021, más de 130 toneladas de alimentos, lo que equivale a 2.260 carros de la compra".
La pandemia del coronavirus ha golpeado económicamente a muchas familias en España, por lo que las colas de alimentos se han incrementado para muchas ONG y bancos de alimentos, que se han visto desbordadas ante la demanda.
Mercadona colabora con 32 fundaciones
Mercadona asegura que su Plan de Responsabilidad Social atiende distintas líneas de actuación sostenibles para "reforzar" la apuesta por el crecimiento compartido con el objetivo de "devolver (a la sociedad) parte de cuanto recibe de ella".
Además de la donación de alimentos, la empresa trabaja con 32 fundaciones y centros ocupacionales en la decoración de sus tiendas con murales de trencadís, elaborados por más de 1.000 personas con discapacidad intelectual.
Desde 2011 es socio del Pacto Mundial de Naciones Unidas para la defensa de los valores fundamentales en materia de derechos humanos, normas laborales, medioambiente y lucha contra la corrupción.