MIR
Cerca de 30.000 estudiantes de medicina, enfermería, psicología y farmacia se presentan a los exámenes para acceder a una especialidad. Muchos de ellos llevan más de un año estudiando una media de ocho horas diarias.
Se juegan también su futuro porque depende de la nota que saquen elegirán especialidad. En enfermería hay 2.108 y pico plazas para más de 9.000 aspirantes. Reclaman más especialidades. Tienen siete; matrona salud mental, trabajo, familia, pediatría, geriatría y médicos quirúrgicos frente a las 51 de medicina, y por ejemplo les gustaría que las Comunidades Autónomas pusieran médicos docentes y sueldos para formar enfermeras de UCI, un trabajo muy tecnificado.
En medicina hay 8.772 plazas para casi 15.000 médicos se quedan fuera más de 6.000. Para medicina familiar, la especialidad que pocos quieren porque está mal pagada hay casi 2.500 plazas, 37 más que el año pasado, y para pediatría 508 son siete más.
Muchos de ellos han decidido estudiar hasta el día de antes, pero la mayoría hoy ha optado por descansar, eso sí, sin arriesgar realizando actividades de riesgo. El año pasado las especialidades más demandadas fueron dermatología, cirugía plástica y cardiología. Este año hay muchas posibilidades de que elijan lo mismo, pero también hay más plazas para medicina familiar o comunitaria.
Aunque dicen los profesionales de esta especialidad que está maltratada porque no pueden tratar a los pacientes con el tiempo que les gustaría debido a las largas listas, y tampoco está bien pagada para la cantidad de trabajo que realizan.
En algunas comunidades, como la de Madrid, se ha mejorado algo. Ha aumentado la retribución porque se ha incluido un complemento como categoría deficitaria. Algo que desde la asociación Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS) esperan que se extienda a otras comunidades autónomas.
Hoy también se presentan farmaceúticos, psicólogos, enfermeras. Aseguran desde el Consejo General de Enfermería que hacen falta más enfermeras y que además muchas de ellas no acabarán ejerciendo en nuestro país. De las 10.000 enfermeras formadas en España, 1.500 se irán a los países del norte de Europa. En estos países cobran entre 4.000 y 4.500 euros y en España 1.500 euros.