EN ESPEJO PÚBLICO
Marcos de Quinto, exvicepresidente y el que fuera también responsable de marketing de Coca-Cola a nivel mundial, considera "una tontería y un despropósito" aplicar un impuesto a las bebidas en función del azúcar que incluye. En una entrevista realizada por Antena 3 Noticias, De Quinto considera una discriminación gravar con un impuesto las bebidas y no otros productos que también están elaborados con azúcares.
"Si es un tema de Sanidad realmente, y el azúcar es malo, que se prohíba o que se ponga un impuesto a todo lo que lleve azúcar", explica de Quinto, que considera la medida "un chiste".
Preguntado sobre el boicot a las bebidas de la compañía, De Quinto cree que "si se hace un boicot lo que se hace es poner en peligro los empleos de los trabajadores que existen en estos momentos, que trabajan en Coca-Cola y de todas las empresas que le suministran productos".
Coca-Cola emplea directamente a 5.000 personas y otros 80.000 trabajadores en empleos indirectos, por lo que le parece imprudente animar a adoptar conductas que pongan en riesgo el empleo de estas personas y anima a Ramón Espinar, secretario General de Podemos en la Comunidad de Madrid, a beber este refresco para defender el trabajo en las embotelladoras.
Preguntado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, De Quinto ha afirmado que es un personaje con bastante "falta de criterio". En su opinión, le parece paradójico que acabe siendo Alemania el país defensor de la libertad, que acabe siendo Estados Unidos como el representante del fascismo o que sea China quién defienda el libre mercado. "El mundo está completamente patas arriba", concluye.
De Quinto abre una nueva etapa profesional ahora que acaba de abandonar The Coca-Cola Company, aunque seguirá vinculado a la multinacional, con sede en Atlanta, como asesor hasta septiembre del próximo año. Previsiblemente se incorporará en los próximos meses al proyecto de Telepizza, empresa para la que trabajará como consejero independiente.