EN CATALUÑA, EN ESPAÑA Y EN LA UE
Miles de personas se han manifestado en Barcelona en contra de los recortes y para pedir un cambio en la política económica en Cataluña, España y la Unión Europea (UE), que ponga fin a la austeridad, facilite la creación de empleo y garantice los servicios sociales básicos del Estado del Bienestar. A la manifestación, convocada por los sindicatos CCOO, UGT, USOC y Unió de Pagesos, con el apoyo de PSC, ERC e ICV, han acudido entre 50.000 personas, según la organización, y 8.000 personas, según la Guardia Urbana, que han recorrido en un ambiente reivindicativo la Via Laietana de Barcelona bajo el lema "Por una Cataluña Social. Defendamos nuestros derechos".
La protesta en Barcelona se enmarca en la convocatoria de la Confederación Europea de Sindicatos contra las políticas de austeridad y para exigir un cambio de rumbo económico a partir de las próximas elecciones al Parlamento europeo. La marcha, en la que también han participado afectados por las preferentes, se ha iniciado poco después de las doce del mediodía en la plaza Urquinaona y ha finalizado, tras recorrer toda la Via Laietana, a las 13.15 horas frente a Correos, donde un niño ha leído el manifiesto unitario en defensa de los derechos sociales.
El manifiesto pide que se imprima un nuevo rumbo en la política económica y que se acabe con los recortes "impuestos" por el Gobierno central y por la Generalitat para "desmontar" el Estado del Bienestar. Los participantes en la manifestación también han reclamado en el manifiesto unitario que se garantice la sanidad y la educación pública, que se luche contra el paro y la precariedad laboral, que se impulsen medidas en contra de la pobreza y a favor de la cohesión social y que se garantice el derecho a una vivienda digna.
Por delante de la pancarta inicial se han situado a lo largo de toda la marcha una cincuentena de discapacitados físicos de la plataforma Ecom, que han clamado contra los recortes en la Ley de Dependencia, así como varios trabajadores de la empresa Panrico, que actualmente atraviesa por un conflicto laboral.
En declaraciones a los periodistas, el secretario general de CCOO en Cataluña, Joan Carles Gallego, ha advertido que la política económica que impulsan actualmente la Unión Europea y los gobiernos central y catalán son "contrarios al interés de los ciudadanos", por lo que ha abogado por un cambio de rumbo que permita aprobar presupuestos extensivos. Gallego ha subrayado la importancia de mantener la presión social para poder cambiar la "cultura económica dominante" y optar por un modelo centrado en las políticas sociales, en el que ningún ciudadano quede excluido.
En la misma línea, el líder de la UGT catalana, José María Álvarez, ha abogado por aprovechar las elecciones europeas para acometer un cambio en la política económica comunitaria, con la creación, por ejemplo, de un fondo de dos billones de euros para crear ocupación a partir de inversiones en infraestructuras. Álvarez ha celebrado además que en España ya se ha llegado a la "recta final" de la etapa de Gobierno de Mariano Rajoy, por lo que entiende que muy pronto se podrá poner fin a los "abusos" de la actual mayoría absoluta y derogar iniciativas como la reforma laboral.
En nombre del PSC, formación que ha estado representada entre otros por el alcaldable por Barcelona, Jaume Collboni, y el secretario de organización, Antoni Balmón, el candidato a las elecciones europeas Javi López ha destacado que la cita en las urnas del próximo 25 de mayo debe servir para crear una alternativa que acabe con las desigualdades sociales.
Por su parte, el candidato de ERC a las europeas, Josep Maria Terricabres, ha admitido que los presupuestos de Cataluña -aprobados por su partido y por CiU-, son "dramáticos" y no le gustan nada, aunque ha afirmado que veía coherente manifestarse en contra de los recortes, porque espera que los de este año sean los últimos. En la delegación de ICV, encabezada por sus colíderes Joan Herrera y Dolors Camats, el candidato a las europeas Ernest Urtasun ha clamado contra la política económica de la troika comunitaria y se ha comprometido a defender los derechos sociales en Europa.